- La memoria histórica es un deber que hay que ir recuperando paso a paso, desvelando el manto que la ha ocultado durante décadas, en este caso, para oprobio de los familiares de las víctimas que no han podido ser recuperadas. Y desde que en 2003 el Gobierno Vasco pusiera sus miras en tratar de desentrañar qué sucedió hace algunas décadas, incluso levantando fosas para poner nombre y apellidos a quienes fallecieron en las cruentas batallas, en Euskadi se va conociendo poco a poco qué es lo que aconteció. Ayer se cumplió una nueva etapa de un camino al que todavía le quedan unos cuantos pasos. Ayer fue exhumado el cadáver de Aniceto Agirrebeitia, natural de Berriz, y que era el mayor de una familia de cinco hermanos que luchó en el batallón comunista Esteban Salsamendi cuando estalló la Guerra Civil. Tenía 26 años cuando murió, según el Instituto de la Memoria, Gogora.

El Gobierno Vasco lleva trabajando desde 2003 en la búsqueda, recuperación e identificación de personas desaparecidas durante la Guerra Civil. Y lo hace de forma exhaustiva, y de la mano de varias asociaciones de memoria histórica. A través de un convenio de colaboración con la sociedad de ciencias Aranzadi, durante este tiempo, se han exhumado 51 fosas y se han recuperado los restos de 108 personas. Según explicó ayer sobre el terreno la consejera Beatriz Artolazabal, “57 personas se encuentran depositadas en el Columbario de la Dignidad de Elgoibar”, espacio inaugurado por el lehendakari Iñigo Urkullu en 2017 para dignificar a los fallecidos en la Guerra Civil. “De ellos, once pertenecen a personas identificadas. 44 reposan en los cementerios de los ayuntamientos en los que se han localizado las fosas. El resto, descansan en otros lugares elegidos por sus familias”, según certificó. “Tenemos que seguir recuperando la dignidad, por los luchadores de la libertad”, señaló la consejera Artolazabal. “Seguimos trabajando”, indicó, “por Aniceto Agirrebeitia y por el resto”.

Respecto a los restos hallados ayer en una zona boscosa de Amorebieta, Artolazabal explicó que “el Instituto Gogora ya ha tomado una muestra de ADN a la familia del combatiente para poder cotejarlo con los restos recuperados hoy -por ayer- y determinar genéticamente la identidad del fallecido. Hasta la fecha, la identificación se ha realizado a través del número de la placa de identificación, el 58.331, que ha aparecido junto a los restos y que pertenece a Aniceto Agirrebeitia Lazpita”. Y es que la placa encontrada junto al cadáver de Agirrebeitia parece que es definitoria de su identidad, si bien ahora tocará elaborar un estudio que correrá a cargo de los científicos de la sociedad de ciencias Aranzadi. “La fosa exhumada fue localizada en julio de 2020 por miembros de Euskal Prospekzio Taldea cuando realizaban labores de prospección en el monte Bizkargi (Amorebieta-Etxano -aunque geográficamente muy cerca de la localidad de Muxika-). Durante estos trabajos se encontró una placa de identificación de Euzko Gudarostea con el número 58.331, junto a otros objetos”, lo que puede llevar a la identificación del gudari del batallón Salsamendi.

En todo caso, la documentación histórica, “concretamente las nóminas del Euzko Gudarostea, ha permitido determinar que el número de placa 58.331 pertenece a Aniceto Aguirrebeitia Lazpita, del batallón nº 44 Esteban Salsamendi del Partido Comunista. A su vez, el registro de fallecidos en Campaña recoge que Aniceto murió en combate el 16 de mayo de 1937”. Cinco sobrinos de la víctima, hijos e hijas de sus hermanas, siguieron ayer las labores de exhumación.

La consejera, que asistió por primera vez a la exhumación de restos vinculados con la Guerra Civil, incidió en que es un deber institucional recuperar a los desaparecidos en combate. “Recuperarlos y devolverles la dignidad que les arrebataron y seguiremos poniendo todo nuestro empeño en ello. Hoy Aniceto representa a todos ellos”. Más si cabe en un caso como el de ayer, en el que la familia asistió a los actos de exhumación del cadáver llevados a cabo por Aranzadi. Este hallazgo “hace que el momento que vivimos sea todavía más emocionante y, sobre todo, hace que nuestro trabajo, el de Aranzadi, Gogora, y Gobierno Vasco, cobre todo su sentido”, según indicó Artolazabal.

Miembros de la sociedad de ciencias Aranzadi rescataron ayer los restos de Aniceto Agirrebeitia en on momento de Amorebieta

Una placa con el número 58.331 perteneciente a Euzko Gudarostea ha permitido identificar al gudari del batallón Salsamendi