- Carmen Calvo se halla ingresada en un hospital madrileño para ser tratada de una infección respiratoria a expensas del resultado del test del coronavirus. La permanencia hospitalaria de la vicepresidenta primera deja en alerta al Ejecutivo de coalición ya que, en caso de que Pedro Sánchez enfermara, sería Pablo Iglesias quien tendría que ejercer como presidente en funciones. Calvo, de 62 años, ya se realizó las pruebas con todos los demás ministros después de que Irene Montero, responsable de Igualdad, diera positivo. En esa ronda, solo Carolina Darias, ministra de Política Territorial, fue la única que dio positivo ese día. Funcionaria de carrera, Calvo se encuentra en la clínica privada Ruber, de Madrid, de acuerdo con los convenios de Muface, la mutualidad pública a la que pertenece. La vicepresidenta ha tenido un gran protagonismo en la gestión de la crisis del coronavirus, en especial en la preparación del decreto del estado de alarma, participando en prácticamente todas las reuniones clave.

La ley fija que Sánchez solo sería sustituido en caso de caer enfermo si dicha dolencia le supusiera una incapacidad para seguir ejerciendo el cargo. La norma prevé que le sucedería la vicepresidenta primera -esto es Carmen Calvo-, a la que seguiría por orden legal el vicepresidente segundo, Pablo Iglesias, y, en defecto de ellos, las vicepresidentas Nadia Calviño y Teresa Ribera, y los ministros, según el orden de precedencia de los Departamentos. Diversos magistrados del Tribunal Supremo y el Tribunal Constitucional, así como catedráticos constitucionalistas, coinciden en señalar que las disposiciones del Real Decreto de Alarma no altera el orden de sustituciones fijado en el artículo 13 de la Ley del Gobierno, ni constitucionalmente se prevé que pueda hacerlo. Añaden que debe haber siempre presidente o vicepresidente, con independencia de que el decreto por la pandemia señale a otros cuatro ministros -Margarita Robles (Defensa), Fernando Grande Marlaska (Interior), José Luis Ábalos (Transportes, Movilidad y Agenda Urbana) y Salvador Illa (Sanidad)- para tomar decisiones relativas a esta situación excepcional.

A este respecto se pronunció el portavoz adjunto del Grupo Popular en el Congreso, Mario Garcés: “¿Alguien ha caído en la cuenta de que, por orden de prelación, si Sánchez cayera ahora y no pudiera ejercer su función, el presidente en funciones sería Iglesias?”, se preguntó el dirigente popular.

Por su parte, Ana Pastor, vicepresidenta segunda del Congreso y expresidenta de la Cámara, anunció ayer que ha superado el coronavirus. “Quiero agradecer a los profesionales sanitarios su gran esfuerzo y dedicación y trasladar a todos los ciudadanos un mensaje de esperanza”, publicó en su cuenta de Twitter. La exministra de Sanidad, de 62 años, que es médico de profesión, fue la tercera diputada cuyo contagio se hizo público, tras los casos de Javier Ortega Smith y Carlos Zambrano, ambos de Vox. El pasado jueves, el líder de la fuerza de ultraderecha, Santiago Abascal, también dio a conocer su recuperación.