- Los representantes de Estados Unidos y Rusia reunidos ayer en Ginebra concluyeron su esperada reunión sobre la situación en Ucrania sin desplazarse de sus planteamientos iniciales y con el único acuerdo de seguir dialogando en un futuro inmediato.

El representante ruso, el viceministro de Asuntos Exteriores Sergei Riabkov, reiteró a la delegación americana que Rusia no tiene intención de invadir Ucrania a pesar de la alarma causada por el incremento de tropas rusas en la zona fronteriza.

“No hay motivo para temer ningún tipo de escalada”, afirmó Riabkov en declaraciones tras el encuentro. Riabkov calificó las conversaciones de “difíciles, largas, muy profesionales, profundas, concretas y sin intentos de evitar las cuestiones conflictivas”. Rusia quiere firmar un tratado de seguridad que incluya compromisos mutuos de no emplazamiento de más misiles de corto y medio alcance en suelo europeo, y garantías de que la OTAN no se expandirá hacia antiguas repúblicas de la extinta Unión Soviética. En este sentido, Riabkov insistió en que Rusia necesita garantías “escritas en piedra” de que Ucrania y Georgia nunca ingresarán en la OTAN.

A este respecto, la vicesecretaria de Estado norteamericana Wendy Sherman, máxima responsable de la delegación estadounidense, explicó que han rechazado “propuestas que Estados Unidos sencillamente no puede contemplar” como la propuesta rusa de que Ucrania no ingrese en la OTAN o que se ponga fin a la cooperación con Kiev.

“No vamos a permitir que nadie ataque la política de puertas abiertas de la OTAN, que siempre ha sido fundamental para la alianza”, explicó Sherman en la rueda de prensa posterior al encuentro. “Un país no puede cambiar la frontera de otro por la fuerza, dictar los términos de terceros países o prohibirles tener alianzas”, advirtió Sherman, que reiteró que “Rusia debe tomar pasos concretos hacia la desescalada de tensiones”, después de haberlas aumentado en los últimos meses con su despliegue de tropas en la frontera con Ucrania.

Ambas partes rebajaron las expectativas de hitos importantes en estos contactos. Sherman destacó que la cita de ayer fue un “diálogo para comprendernos mejor mutuamente”, aunque “no es lo que se podría llamar una negociación”. Riabkov valoró que el tono de los contactos “da pie al optimismo”, pero matizó que las cuestiones principales “siguen en el aire y no vemos que los americanos comprendan la necesidad de tomar decisiones que nos puedan satisfacer”.

La “número dos” de la diplomacia norteamericana señaló, no obstante, que en las reuniones hubo un diálogo abierto sobre la posibilidad de reducir recíprocamente las maniobras militares en zonas de Europa “fronterizas” entre la OTAN y el área de influencia de Rusia. También se discutió la solicitud rusa de reducción de armamento nuclear y no nuclear en suelo europeo, aunque en este sentido Sherman afirmó que se necesitan “debates más profundos sobre la cuestión”. Queda ahora por saber la fecha de una segunda ronda de negociaciones, aunque Riabkov subrayó ayer que el diálogo no “puede transformarse en un proceso que lleve meses o años”

Por otra parte, Ucrania detuvo ayer a un agente de los servicios de inteligencia rusos que, según Kiev, planeaba una serie de ataques terroristas en la región oriental de Odessa. Según las autoridades ucranianas, el agente era un extranjero que venía periódicamente a Ucrania en nombre de los servicios secretos rusos.

“La tarea principal del detenido era sacudir la situación sociopolítica en la región de Odessa a través del sabotaje y actos terroristas”, sostuvo el Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU) en una nota. El SBU aseguró que este hombre organizó el incendio provocado de un vehículo militar del ejército ucraniano en Odessa el pasado diciembre.