madrid - El presidente de Rusia, Vladímir Putin, calificó ayer de “tragedia” la guerra entre las fuerzas armadas de Azerbaiyán y Armenia en el enclave separatista de Nagorno Karabaj, al tiempo que instó de nuevo a un cese al fuego.

“Esto es una tragedia. Nos afecta mucho. Porque Azerbaiyán y Armenia, Nagorno Karabaj, son todos territorios en los que viven personas que no nos son ajenas. Basta con decir que viven unos dos millones de azerbaiyanos en Rusia y más de dos millones de armenios, según nuestros cálculos”, afirmó Putin en una entrevista con el canal de televisión Rossía-1.

Resaltó que “un gran número” de rusos mantienen relaciones amistosas estrechas e incluso familiares con ambas repúblicas. “Desde luego es una gran tragedia. Muere gente, hay pérdidas grandes en ambos lados. Esperamos que este conflicto termine en un futuro muy cercano. Pero si no se resuelve de manera definitiva (el conflicto), aparentemente esto está lejos, en cualquier caso instamos a un alto el fuego. Y hay que hacerlo cuanto antes”, dijo.

Putin recordó en la entrevista que Armenia es miembro de la OTSC y que por ende Rusia tiene “ciertas obligaciones” con ese país. “Pero las acciones bélicas, muy a nuestro pesar, continúan hasta hoy, pero no se llevan a cabo en el territorio de Armenia”, indicó el presidente ruso.

El alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, alertó ayer de la escasez de noticias y la desinformación sobre lo que está pasando en la región de Nagorno Karabaj. Según Borrell, los Veintisiete no tienen “mucha información” de los acontecimientos sobre el terreno, hecho que está provocando numerosas “noticias falsas”. Por ese motivo, indicó, los informes que llegan deben ser analizados con “precaución”. Borrell explicó además que habló con los ministros de Exteriores de Azerbaiyán y Armenia para urgirles sobre la necesidad del cese de la violencia y la vuelta a la mesa de negociaciones.

Una víctima iraní. El Gobierno de Irán protestó por el impacto en su territorio de proyectiles disparados por las partes en conflicto y alertó de que podría tomar medidas en caso de que continuaran estos incidentes, que hasta la fecha han dejado un niño herido. “No es aceptable para nosotros que proyectiles de artillería y mortero impacten en territorio iraní. Pedimos a los dos países vecinos, con los que tenemos buenas relaciones, que presten atención a este importante asunto”, reiteró Rohani, presidente de Irán.