La vicelehendakari y ministra de Trabajo y Empleo, Idoia Mendia, instó ayer a combatir el negacionismo en torno a la brecha salarial “Hay quienes niegan esta realidad y quieren desmontarla, pero no venimos a especular, venimos desde una convicción y un compromiso: no puede haber una sociedad plenamente democrática si las mujeres y los hombres no tenemos la misma libertad para tomar decisiones sobre nuestras vidas y nuestro trabajo”, señaló Mendia durante la inauguración del I Congreso sobre Brecha Salarial, organizado por su departamento.

La consejera recordó que la brecha salarial todavía se sitúa en Euskadi en un “preocupante” 19,5%. En su análisis, Mendia apuntó también a los contratos parciales “no deseados” y remarcó que desde hace 20 años el 25% de las mujeres trabajadoras tienen contratos parciales frente al 5% de los hombres. Otras barreras a superar son las familiares: “Tener hijos hoy en día eleva la inactividad de las mujeres en doce puntos y solo la tercera parte de las mujeres con hijos trabajan a jornada completa”, explicó.

“Conquistar el derecho a que las mujeres decidan sobre su maternidad es una gran logro social, pero aún queda pendiente garantizar que esa libertad no les limite su progreso profesional y, por tanto, el progreso económico”, apuntó. En este sentido, la presidenta de la Comisión de Igualdad del Congreso de los Diputados y exvicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, que intervino vía online, exigió “un gran debate público y político” sobre la maternidad.

“Siempre se ha considerado un asunto del ámbito privado”, lamentó, cuya consecuencia es que la mujer ha retrasado la edad de ser madre o directamente ha decidido no tener hijos. “No puede ser que las mujeres hoy en día esperen a los 42 años para ser madres”, subrayó. “La maternidad no puede ser un problema. Es necesario un cambio de percepción empresarial, social”, añadió. En esta línea, la apostó por un cambio en los horarios laborales “que hagan compatibles el trabajo y la vida”.