"Estoy a la espera de ver qué ayudas me corresponden como autónoma"

elén Ibañez es la dueña de la peluquería Bels de Zarautz. En este momento su establecimiento se encuentra cerrado, como muchos otros negocios, por el confinamiento. Cerró la puerta de la peluquería el 14 de marzo, el día en que el Gobierno declaró el estado de alarma y obligó a cerrar establecimientos como su local.

Como es autónoma, en este momento no obtiene ningún ingreso y se mantiene en contacto con la gestoría que lleva su negocio con el objetivo de ver cuál puede ser la solución para hacer frente a su situación económica: "Estoy a la espera de ver qué ayudas me corresponden como autónoma, ya que la información cambia de un día para otro", explica Ibáñez a NOTICIAS DE GIPUZKOA.

Ella es dueña de la peluquería Bels desde hace cinco años y nunca ha estado en esta situación de incertidumbre. "La asesoría me ha avisado de que por ser propietaria del local no tengo derecho a las ayudas del Gobierno Vasco, así que estoy en contacto con la asesoría casi a diario para ver qué opciones puedo tener", aclara Ibáñez.

Junto a ella trabajan otras dos empleadas y ambas están en ERTE desde el 18 de marzo. De forma conjunta, decidieron que esta sería la mejor opción dada la situación.

Para ella, supone una pérdida importante tener la peluquería cerrada. Antes del confinamiento, compró varios productos a los que ahora no les puede dar salida y, además, tiene que pagar a los proveedores.

Su peluquería también cuenta con un servicio de asesoramiento y venta de distintos tipos de pelucas hechas con pelo natural o pelo sintético.

Normalmente suele asesorar a las mujeres que han perdido su cabello debido al tratamiento de quimioterapia que reciben para tratar el cáncer. Ibañez explica que este servicio es "de gran ayuda" para ellas, porque las pelucas ayudan a manter "un buen estado físico y también mental". Esa es otra parte de su negocio que durante el confinamiento permanece estancado.

Ibáñez afirma que los días antes de cerrar la peluquería fueron un poco "raros": "Era una situación rara y no sabía bien cómo actuar. En general la gente actuaba con normalidad, pero sí hubo clientas que anularon su cita el mismo sábado por miedo a contagiarse o porque ya estaban confinadas en casa".

Como en la peluquería el contacto con los clientes es constante, no pudieron tomar demasiadas medidas de seguridad antes de cerrar. "Aparte del lavado más frecuente de manos no se tomaron más medidas", explica, aunque añade que es un ejercicio que en las peluquerías se hace constantemente, porque cada vez que utilizan algún producto, proceden a lavarse las manos.

Como muchos dueños de negocios, ella también siente la incertidumbre de cuándo se podrá volver a trabajar con normalidad. Bels es una peluquería a la que acude gente de todas las edades, tanto hombres como mujeres.

Según la dueña, la clientela está muy preocupada y algunas de ellas se han puesto en contacto con ella para saber cuándo reiniciará su actividad: "Por lo que escuchas a las clientas, todas están deseando que la apertura de los negocios sea cuanto antes. Pero por otro lado, existe cierto miedo, ya que se supone que el Estado adoptará medidas restrictivas respecto al aforo de los locales y medidas de seguridad que no sabemos cómo nos vamos a poder adaptar a ellas", comenta.

A pesar de toda esta incertidumbre, Ibáñez está pensando en hacer algunas pequeñas reformas en su peluquería, para que a la vuelta del confinamiento su local tenga "un aire nuevo".

Al fin y al cabo, parece que el confinamiento está dando pie a que la gente desarrolle su lado más creativo y eso ayuda a que toda esta situación sea más llevadera para algunas personas.

Zarautz. La peluquería Bels está situada en la Avenida Navarra de Zarautz y Belén Ibañez es la dueña del local desde hace cinco años.

Pelucas. La peluquería también cuenta con un servicio de asesoramiento y venta de distintos tipo de pelucas hechas con pelo natural o sintético. Normalmente suelen asesorar a mujeres que pierden el cabello debido al tratamiento de quimioterapia.

"Hubo clientas que anularon su cita el mismo sábado por miedo a contagiarse"

"Estoy en contacto con la asesoría casi a diario para ver qué opciones puedo tener"

"Las clientas están deseando que la apertura de los negocios sea cuanto antes"