donostia - La estrategia está marcada y definidas las actuaciones a desplegar para lograr que Euskadi, como destino turístico multiproducto único y singular que es, afiance su posición privilegiada en los mercados internacionales principalmente pero sin descuidar a los visitantes domésticos. La hoja de ruta fue presentada ayer por la consejera de Desarrollo Económico y Competitividad, Arantza Tapia, y la viceconsejera de Turismo y Comercio, Itziar Epalza, quienes apostaron por reforzar la marca basque country con calidad, innovación, formación y colaboración entre las empresas del sector (pequeñas y medianas fundamentalmente) y entre las distintas esferas públicas y privadas del territorio vasco.

No en vano, hasta 41 agentes han participado en la elaboración de este Plan Estratégico de Turismo 2020 (y más de un centenar lo han analizado) que pretende engrasar una pieza esencial en el desarrollo económico de una sociedad avanzada. El resultado son diez metas a lograr y 128 iniciativas que buscan hacer de Euskadi un destino diferenciado y más atractivo aún para los city breakers, esos modernos y cosmopolitas exploradores que aprovechan fines de semana largos para coger un avión (o el coche) y descubrir una capital europea o, como en el caso vasco, un pack de ciudades complementarias entre sí y que, además, ofrecen al viajero la posibilidad de playa o montaña.

líneas de actuación De este modo, una de las principales líneas de actuación será la de priorizar algunos perfiles turísticos cuya fidelidad hacia tierras vascas está más que probada. Así, detalló Epalza, se reforzarán las líneas de trabajo con Francia, Alemania y Gran Bretaña, países de procedencia de la mayoría de los turistas extranjeros. De hecho, este trío de ases supuso el año pasado casi la mitad (43%) del total de forasteros que llegaron a Euskadi. En concreto, 381.800 de los 869.270 extranjeros que visitaron Bizkaia, Araba y Gipuzkoa. Se trata pues, de mercados potenciales maduros con predisposición a este tipo de escapadas cortas gracias, sobre todo, a las conexiones aéreas, y las ferroviarias y por carretera en el caso del país galo.

Todo ello sin desatender a los miles de turistas de otros puntos -italianos, nórdicos, centroeuropeos, estadounidenses, madrileños, catalanes, etc.- que también están en el punto de mira de este Plan Estratégico. Para ello, además de los tradicionales reclamos que representan la cultura, la gastronomía y la naturaleza, se plantea la promoción turística en otros segmentos emergentes como el deportivo, el de la salud, o el del surf (la costa vasca ofrece medio centenar de olas practicables), avanzó la viceconsejera de Comercio y Turismo. No en vano Surfing Euskadi -de reciente creación y liderado por la Agencia Vasca de Turismo-Basquetour- agrupa a más de 40 entidades público-privadas capaces de ofrecer esta experiencia a todos los públicos posibles, facilitando una serie de servicios para el turista de forma organizada única y pionera en el Estado español.

modernización En definitiva, una decidida apuesta por modernizar el sector y buscar fuentes de ingresos alternativas con las que poder generar actividad económica, empleos y, por tanto, riqueza. Y es que, como expresó la consejera Tapia, "es un plan del país, no solo del Gobierno" que marcará el camino a seguir para superar una etapa con un sector disgregado y con escasa o nula colaboración entre sí. "El plan busca posicionar a Euskadi como un destino turístico más competitivo, con un sector más profesional y rentable, que gane peso en la actividad económica del País Vasco. Llega el momento de buscar la productividad y la eficiencia del sector, en definitiva la rentabilidad, que dan los servicios avanzados llegando a ser un destino inteligente", agregó Arantza Tapia.

Para lograrlo se plantean distintas iniciativas concretas, entre las que destaca la modificación de normas como la actual Ley de Turismo vasca, que data de 1994. Además se identificarán posibles fuentes de captación de recursos y financiación en beneficio del sector, siempre buscando la colaboración público-privada y la coordinación de todas las administraciones y agentes sectoriales interesados.

complicidad Un panorama cautivador que, no obstante, requiere de la complicidad de los comercios y de la hostelería vasca. No se plantea una revisión de los horarios o los días de apertura, pero para hacer efectiva esa vinculación de los recursos turísticos a la actividad económica sí que es necesaria mayor flexibilidad para poder dar respuesta a las necesidades de los visitantes.

Por todo ello, tanto Tapia como Epalza invitaron al sector del comercio y de la hostelería a "reflexionar sobre la flexibilidad que esa normativa nos permite, sobre la posibilidad de determinadas aperturas en momentos que el sector considere que son los oportunos para la generación de actividad y negocio".

¿Qué es? Viaje de corta duración con una ciudad como destino. Su finalidad suele ser el turismo cultural, generalmente a una ciudad europea aprovechando un puente o alargando un fin de semana. El city break es una de las tendencias en boga en el sector turístico.