La lucha por las audiencias entre La Revuelta y El Hormiguero sigue más viva que nunca.
Este jueves Alejandro Sanz visitó a Pablo Motos y quiso sacar el tema para hacer de mediador, ya que el lunes visitará a Broncano.
“Yo sé una colaboración musical tuya... ¿la puedo decir?”, espetó Motos ante la negativa del cantante andaluz, que cambió rápidamente de tema para hablar de Broncano. "¿Por qué no hablamos mejor de tu pelea con David?".
El cantante explicó que suele jugar a tenis con el presentador de La Revuelta, y que "desearía" que se llevaran bien. "Si quieres que le mande una notita o algo, yo voy el lunes allí. Como me obligaste a venir aquí antes porque si no no podría ir..." dijo en tono de broma, algo que Motos frenó rápido, alegando que la lucha por la exclusividad de los invitados ha sido algo que "se ha inventado la prensa".
Inmediatamente, Sanz pidió al presentador que escribiera una "notita" para llevársela el lunes: "Quiero pacificaros porque los dos estáis deseando en el fondo".
El mensaje de Motos
"Querido David, ¡pelillos a la mar! Te deseo lo mejor y espero que nos veamos pronto. Te quiero, Pablo. Y a Ricardo y a Grison, también", decía el texto escrito por Motos.
El cantante mostró su satisfacción al asegurar que con esa nota se ahorra "la pelea", a lo que Motos sentenció diciendo que "no ha habido ninguna pelea, te pido que no digas eso".
El Hormiguero recupera el liderazgo
Después de varios meses viéndose superados por Broncano en audiencias, El Hormiguero lleva varios días congregando a más espectadores que el programa de RTVE.
Concretamente, este jueves tuvo un 16.9% de share y 2.207.000 espectadores frente al 13.7% y los 1.804.000 espectadores de La Revuelta.
Semana mala en La Revuelta
Este lunes La Revuelta vio como las redes le daban la espalda por primera vez, y casualmente un día después, el martes, el espacio anotó mínimo en su franja habitual con un 12,8%.
Aunque el motivo de la audiencia puede tratarse de varios factores, las críticas hacia el programa del lunes van todas en la misma dirección: la elección del invitado.
El culturista valenciano Joan Pradells visitó a Broncano. Con sus 130 kilos actuales a sus 28 años, el joven habló sobre su dieta y su día a día, y la normalización de su cuerpo y su estilo de vida desató duras críticas hacia el programa.
Duras críticas al programa
"La semana pasada una entrevista de la hostia con Noah, ayer éste, que entiendo que la dismorfia y la vigorexia son enfermedades poco vistas... Pero no le digáis lo bien que lo hace cuando se está destrozando el cuerpo por dentro y por fuera. No normalicemos los anabolizantes", respondió un usuario al tuit del programa que decía que daba "gusto" ver al invitado.
"No. No da gusto verle. Le cuesta respirar incluso sin moverse. Este señor no está sano. Equivocamos musculatura o delgadez con salud y nada más lejos de la realidad", señalaba otro
"Da muy mal rollo y no creo que sea sano ni desde luego un modelo para nadie. Dicho eso, oye, que cada uno haga lo que quiera y que seguro que es un tío majísimo", se podía leer también entre las respuestas al tuit.
"Esta de anabolizantes hasta las orejas. No le considero referente de nada. Error grande fomentando este tipo de atajos para ganar músculo", escribía otro.
Pérdida de audiencia
La decisión del programa de invitar al valenciano provocó que numeroso telespectadores cambiaran de canal: "A mi me dio tanta grima que lo deje de ver. Debe ser la primera vez que quito el programa".
"No habéis estado finos con el invitado. No es un buen ejemplo, le costaba respirar, no estaba sano... me gustó más la actriz de después y estuvo menos tiempo. Sigo insistiendo en que la presencia masculina prevalece en el programa y eso no es bueno", criticaba otro seguidor del programa.
En la misma dirección, otro espectador lamentó la poca ejemplaridad del programa ese día: "A veces se cometen errores. Esta vez creo que ha sido uno de ellos. No es ejemplar, no es sano. Hoy salió cruz".
"Un perdonable resbalón habéis tenido presentando a ese chico como algo ejemplar cuando es todo lo contrario", sentenció otro.
