"Mi programa favorito fue "La mirada mágica"

donostia. Llega un día en el que Otermin le propone a Josu Ortuondo, director general de EiTB entonces, un cambio. Tras una conversación se abre la era ETB. En este medio fue el impulsor de Goenkale.

Deja la radio para ir a la televisión...

Llegó un momento en el que tenía claro que lo que tenía que aportar a la radio ya estaba hecho. Hablé con Josu Ortuondo y le pedí un cambio.

¿Qué fue la televisión para usted?

Un desafío. Mi primer cometido fue el de director de Programas y director del centro de explotación de Miramon.

¿Cómo ve la televisión?

Se ve difícil, la economía va como va, y por otra parte, la fragmentación de audiencias es un hecho. No creo que haya medio de comunicación, ni privado ni público, que esté satisfecho.

¿Ha tenido la tentación de eliminar algún programa?

Estuvimos en el filo del cuchillo, tirando a un lado estuvimos muy cerca de eso que se llama televisión basura. Pero puedo decir que esta casa nunca me impidió mirar a la gente a los ojos.

Si tuviera que elegir un programa...

La mirada mágica. El peor día de mi vida fue cuando murió parte del equipo de este programa.

Patxi López piensa que EiTB puede ser un producto caro.

La sociedad vasca se puede permitir tener los medios públicos que están amparados bajo el paraguas de EiTB.

¿Cuáles son sus últimos recuerdos de esa empresa a la que mañana (por hoy) dice adiós?

En los últimos meses volví a la radio. Hice un programa, Memorian. Recuperando muchas voces musicales importantes. También hice el Camino de Santiago y todos los días desde el móvil pasaba una crónica.

¿Tiene previsto qué va a hacer?

En Amezketa, mi pueblo, he encontrado una pequeña mina. Tengo previsto escribir sobre pequeñas pero interesantes historias de este pueblo. Seguiré usando mi furgoneta, tendré siempre la nieve de Pirineos, cumbres por subir, un buen vaso de vino de La Rioja...