'Alcatraz': la versión extraoficial
La Sexta estrena esta noche los dos primeros capítulos de la nueva serie de J. J. Abrams, creador de 'Perdidos'
DONOSTIA
No es exagerado decir que se trata de la serie estadounidense más esperada de la temporada, sobre todo, después de las decepciones y cancelaciones que hubo en los últimos meses de 2011. Estrenada por el canal TNT el 17 de enero (un día después que en EEUU), esta noche llega a La Sexta con dos capítulos seguidos. El sello de J. J. Abrams en la producción ya ha hecho correr ríos de tinta sobre si es la sucesora de Perdidos, y es cierto que lleva la marca de la casa en su desconcertante punto de partida y en su ambientación en una isla. Por si fuera poco, uno de sus protagonistas es Jorge García, el entrañable Hurley de la serie de los náufragos. Sin embargo, la estructura es totalmente distinta aunque se vislumbra el mismo problema para acabar la trama con un final lógico.
"El 21 de marzo de 1963, Alcatraz cerró oficialmente debido al incremento de los costes y el deterioro de las instalaciones. Todos los prisioneros fueron trasladados fuera de la isla. Solo que eso no fue lo que pasó…". Una voz en off explica al inicio que la historia de la prisión más famosa del mundo no es como la cuentan las autoridades. Aquella noche desaparecieron más de 300 personas entre reclusos y guardias. La joven detective de San Francisco Rebecca Madsen (Sarah Jones) y el experto en la historia de Alcatraz Diego Soto (Jorge García) se unen a una unidad especial del FBI que dirige el agente Emerson Hauser (Sam Neill), pero no tienen ni idea de dónde se están metiendo. Solo saben que asesinos que estaban encerrados 50 años atrás en La Roca han regresado con idéntico aspecto físico (no como zombis, no) para seguir su carrera criminal. A través de flashbacks, Alcatraz retrocede medio siglo para mostrar cómo eran esos presos y también los funcionarios, especialmente el alcaide Warden Edwing James y su mano derecha, el sádico E. B. Tiller.
"Esto es Alcatraz. Las cosas siempre pueden empeorar", recuerda la máxima autoridad de la prisión en el primer capítulo. Un episodio con una arquitectura narrativa que lleva al espectador de sorpresa en sorpresa y en el que conviene estar muy atento porque contiene las claves de la serie. Unos minutos finales impresionantes dejan al público en vilo. ¿No hay nada malo que decir de Alcatraz? Tal vez la ausencia de química entre la detective y el historiador, eclipsados ambos por un personaje de perfil mucho más alto, el de Sam Neill en el que puede ser el papel de su vida.