espectáculo - El polifacético presentador de televisión Jorge Javier Vázquez volverá a subirse a las tablas para presentar la obra Desmontando a Séneca, un “espectáculo necesario en este momento vital” que trata sobre la brevedad de la vida y la muerte. Vázquez vuelve tras un año sin pisar los escenarios por el ictus que sufrió en marzo de 2019.

Jorge Javier Vázquez, que en el año 2015 ya presentó La vida iba en serio, una comedia sobre su propia trayectoria, vuelve esta vez a los escenarios renovado, con casi quince kilos menos y una nueva concepción de la vida, que se toma “con más calma” a pesar de su apretada agenda.

“La obra es totalmente necesaria en el momento vital en el que estoy, me ha cambiado por completo, me ha llevado a entender y aceptar los conceptos de la vida y la muerte, y eso me ha dado una tranquilidad tremenda”, explica en una entrevista el presentador, haciendo referencia al ictus que sufrió el pasado marzo.

su situación El proyecto, cuya gira comenzará el 13 de marzo en Córdoba, nace, precisamente, “a raíz de tener que hacerle frente a una situación como la que tuve que afrontar”, desgrana sobre la obra, cuyas entradas para la primera actuación fueron agotadas a escasas horas de ponerse a la venta, y cuyas funciones compaginará con sus trabajos en televisión al frente de los programas Sálvame, Sábado Deluxe y Supervivientes.

Presentador, escritor, productor y actor, Jorge Javier Vázquez tiene claro que su truco estrella para poder hacer frente a tantas facetas es, sin duda, su pasión por el trabajo: “Me gusta trabajar, y además me lo paso muy bien”, explica, aunque, además de este punto, resalta que el hecho de “no tener pareja ni hijos” es esencial, puesto que le permite “disponer de todo el tiempo para centrarme en mí mismo”.

Y es que, Jorge Javier Vázquez presume de una carrera televisiva de más de veinte años frente a las cámaras. ¿La clave para permanecer impasible en escena a lo largo del tiempo? Vázquez matiza que se debe a “varios factores” que, además, evolucionan a lo largo del tiempo.

“Creo que la forma de ser y trabajar tiene que conectar con la audiencia del momento; probablemente, mi forma de hacer televisión hace treinta años no se habría aceptado”, apunta, puntualizando además que “el mérito no es solo de uno mismo, sino también de estar en el momento y lugar correctos”.

Una conexión con la audiencia y una forma de presentar que han consolidado al barcelonés como uno de los presentadores consagrados de la televisión nacional: “mi carrera ha ido poco a poco, y eso ha sido una suerte; he podido aprender de quien admiraba mucho, he sido colaborador muchos años, por lo que todo ha ido surgiendo de forma escalonada”, reflexiona sobre su evolución.

El presentador ya llevó al escenario en 2015 ‘La vida iba en serio’, una comedia sobre su propia trayectoria