El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha asegurado que siente "pena y rabia" ante la vacunación irregular contra la pandemia de la covid-19 de algunas personas, como los directores de los hospitales bilbaínos de Basurto y Santa Marina, Eduardo Maiz y José Luis Sabas. También se ha referido al toque de queda y el Consejo Interterritorial, las transferencias y la cogobernanza.