Sanidad prohíbe los vapers desechables y fumar a 15 metros de zonas protegidasFreepik
Donostia – Los cigarrillos electrónicos desechables tienen los días contados. El último borrador del anteproyecto de reforma de la Ley antitabaco contempla la prohibición de estos dispositivos de usar y tirar, que tienen una especial aceptación entre los consumidores más jóvenes. En línea con el compromiso de endurecer la normativa, el Ministerio de Sanidad quiere que esta impida también fumar y vapear a menos de quince metros de los accesos a espacios protegidos, como son los edificios públicos, centros sanitarios, educativos o parques infantiles, entre otros.
Una de las principales novedades de este anteproyecto de Ley que modifica la normativa antitabaco vigente desde 2005 es, precisamente, la prohibición de la comercialización de los cigarrillos electrónicos de usar y tirar. Se trata de dispositivos provistos de un líquido con o sin nicotina, listo para su consumo y desechable tras su uso, tal y como define el documento, que justifica su prohibición en que “presentan una mayor prevalencia entre los adolescentes y jóvenes” porque les resultan “especialmente atractivos”, sobre todo por sus sabores.
Vapers de usar y tirar
Más tóxicos que el ‘pitillo’. Un estudio de la Universidad de California en Davis (Estados Unidos) revela que algunos cigarrillos electrónicos desechables y cápsulas de vapeo liberan mayores cantidades de metales tóxicos que los cigarrillos tradicionales. Así, uno de los vapers de usar y tirar estudiados liberó más plomo durante un día de uso que casi 20 paquetes de cigarrillos tradicionales. La mayoría de los consumidores de cigarrillos electrónicos desechables son adolescentes o adultos jóvenes.
Asimismo, el borrador de la futura Ley define nuevas zonas libres de humo o amplía las existentes, sobre todo en exteriores. En este sentido, considera centro de trabajo los vehículos laborales y especifica que no se podrá fumar en los espacios al aire libre o cubiertos comprendidos en los recintos de centros sanitarios ni en universidades y centros de formación de adultos. Tampoco se podrá en instalaciones deportivas, piscinas de uso colectivo y recintos donde se desarrollen espectáculos públicos, tanto interiores como exteriores, ni en bares y restaurantes, sea dentro o fuera en las terrazas. Otras zonas libres de humo serán los centros de ocio o esparcimiento, salvo en espacios al aire libre; salas de fiesta; establecimientos de juego o de uso público en general, con independencia de si hay o no menores y los parques infantiles y áreas de juego para la infancia. Destaca también como novedad la supresión de los clubes de fumadores.
Además, se refuerza la protección en los entornos de espacios protegidos, de modo que quedará prohibido fumar y vapear “en un perímetro que diste menos de quince metros lineales” de los accesos a edificios públicos, centros sanitarios y sociales o parques infantiles, entre otros.
La industria tabacalera tendrá doce meses desde que se apruebe la ley para introducir el empaquetado neutro. Tanto el interior como el exterior tendrán un color único, que el fabricante elegirá entre los dos que se concreten en una orden ministerial. Esto afecta también al papel y filtros. Por último, pone coto a la publicidad y patrocinio, prohibidos “en todos los medios y soportes, incluidas las máquinas expendedoras y los servicios de la sociedad de la información”.
Más impuestos
Estas medidas han sido bien recibidas por la Asociación Española Contra el Cáncer. Así, su portavoz, Laura del Horno, aplaudió la actualización de la Ley Antitabaco, sobre todo en la ampliación de espacios libres de humo de tabaco y su equiparación con cigarrillos electrónicos y tabaco calentado. Aun así, abogó por endurecer la fiscalidad para los productos de tabaco y nicotina.