Gipuzkoa está en pleno diseño de un nuevo plan para fomentar el uso del euskera inspirado en el espíritu del Euskaraldia y los Arigunes, lugares con una base sólida del conocimiento de la lengua y que asuman el compromiso de intentar funcionar en euskera a todos los niveles, que es uno de los objetivos principales de este plan que verá la luz en los próximos meses.

El Plan de Uso del Euskera, elaborado por la Dirección General de Igualdad Lingüística, será el séptimo puesto en marcha la Diputación Foral de Gipuzkoa y ejecutará hasta 2027 las normas y criterios desarrollados por el Gobierno Vasco. 

En una pregunta parlamentaria formulada por EH Bildu, la diputada general de Gipuzkoa, Eider Mendoza, asegura que “el plan que está a punto de terminar de redactarse” y servirá de “marco general” antes de “desarrollarlo y difundirlo por departamentos a través de los planes de gestión”. 

Mendoza reconoce en su respuesta que, aunque “sería largo dar a conocer todos nuestros proyectos, hay dos que merecen una dedicación y un esfuerzo especial”: se trata, por un lado, del proyecto Gipuzkoa Arigune y, por otro, Badalab, el laboratorio de innovación lingüística, que está bajo la adscripción de la Dirección General de Igualdad Lingüística. 

"Gipuzkoa Arigune es una visión de futuro. Es un escenario en el que cualquiera se relacionará cómodamente en euskera"

Eider Mendoza - Diputada general de Gipuzkoa

Mendoza insiste en que “en esta legislatura queremos poner especial dedicación en la realización de estudios científicos y la innovación de nuestra actividad en relación al impulso del uso del euskera.

Gipuzkoa Arigune

El proyecto Arigune es quizá la iniciativa estrella de las acciones que se llevarán a cabo este año para impulsar el uso del euskera en Gipuzkoa. EH Bildu también preguntó a la diputada general por el estado de maduración de este proyecto. 

La premisa es la siguiente: ¿Es posible convertir todo Gipuzkoa en Arigune? La diputada general reconoce en su respuesta parlamentaria a EH Bildu, que “Gipuzkoa Arigune es una visión de futuro. Es un escenario en el que cualquiera se relacionará cómodamente en euskera, con cualquiera y en cualquier momento; por tanto, el euskera será un vehículo para lograr una sociedad más cohesionada”. 

El centro Badalab estudia qué localidades o barrios pueden ser adecuados para iniciar este año las primeras experimentaciones del proyecto Gipuzkoa Arigune

La base de dicho proyecto, insiste Mendoza, es “animar a cada hablante a dar un paso más”: por un lado, creando “la necesidad y el deseo de llegar a la comprensión del euskera”. Y por otro, “activar nuevas actitudes y prácticas lingüísticas” sobre la base de la comprensión. 

“El núcleo central del proyecto (Gipuzkoa Arigune) surgió con la concesión del Premio Abadia a Pello Jauregi en el año 2020”, cuando el impulsor de las figuras de ahobizi y belarriprest de cara al Euskaraldia interpeló con la pregunta: "¿Para cuándo Gipuzkoa arigune?”. Así lo reconoce Mendoza. 

La diputada general explica en su respuesta a EH Bildu que “en estos momentos se están poniendo en marcha experiencias en diferentes localidades (Beasain, Errenteria...) en base a la metodología Aldahitz impulsada por el Cluster de Sociolingüística”. 

Mendoza añade que “para idear, diseñar y desarrollar el proyecto, la oficina técnica Gipuzkoa Arigune trabaja desde enero de 2023 en la sede de badalab. A nivel territorial, es en esta oficina donde se está estudiando, en estos momentos, qué localidades o barrios pueden ser adecuados para iniciar las primeras experimentaciones”. 

Serán tres en total. Una vez acordadas, la oficina se pondrá en contacto con los agentes de dichas localidades o barrios para buscar el consenso (en marzo y abril) y con la intención de realizar un análisis comunitario posterior (junio-septiembre) para, a continuación, iniciar la experimentación.

La diputada general admite que, para dar a conocer el proyecto, la Diputación Foral de Gipuzkoa y Euskaltzaleen Topagunea, han contrastado con 40 agentes colectivos e individuales para recoger más aportaciones. 

Y añade que, una vez desplazados a nivel local o vecinal, “se buscará la colaboración con todos los agentes sociales que se organicen en dichos pueblos o barrios, en función de los resultados del estudio comunitario y con todos los partidos con representación a nivel municipal, tanto de gobierno como de oposición”.

La Oficina Gipuzkoa Arigune, como espacio de experimentación, “tendrá una primera fase de cuatro años, tras la cual todos los participantes valorarán su idoneidad”, aclara Mendoza. 

En el caso de Badalab, “nuestro deseo sería consolidarlo en esta legislatura, no sólo entre los Centros de Referencia de la Diputación Foral de Gipuzkoa, sino también a nivel de Euskal Herria y a nivel europeo".