Zaporeak ha apelado a la solidaridad de la ciudadanía tras verse obligada a "superar sus límites" y repartir 2.700 raciones de comida al día en la isla griega de Lesbos, donde empiezan a llegar cada vez más "refugiados palestinos" que huyen de la guerra.

Esta organización social ha explicado este miércoles, en un comunicado, que en sus ocho años de andadura ha visto cómo refugiados de distintos orígenes como Siria o Afganistán pasaban por las islas griegas en busca de una vida digna, "sin discriminaciones, ni peligro".

Zaporeak ha detectado en los últimos días un incremento de refugiados palestinos en Lesbos ya que, según sus datos, de las 144 personas que han llegado al campo de refugiados entre el lunes y el miércoles un total de 39 eran palestinos.

Actualmente, en el campo de Kara Tepe hay registradas 4.418 personas, de las cuales casi el 20% son niños y menores de 12 años y más de 1.000 no tienen ningún documento de registro en su proceso de asilo por lo que otro día las más de 2.500 raciones de comida que prepararon los voluntarios de Zaporeak se quedan "cortas".

En este contexto, Zaporeak tuvo que sortear este martes otra "situación especial" al tener que repartir 2.700 raciones de comida, ya que en "las pateras recién llegadas viajaban decenas de familias en situación de vulnerabilidad que no estaban registradas, pero necesitaban una ración" para alimentarse.

En este contexto extremo, Zaporeak ha hecho un llamamiento a la "solidaridad y empatía de la sociedad" para continuar con su labor en este campamento de refugiados en el que sobreviven personas de distintos orígenes, ya que el 4 % procede de Afganistán, el 17% de Eritrea, el 10% de Palestina, el 9% de Siria y el 4% de Sudán.

"Necesitamos seguir cocinando, los miles de solicitantes de asilo que malviven en los campamentos de refugiados necesitan que sigamos trabajando para intentar mejorar su situación de vida", concluye Zaporeak.