El abandono educativo sube por primera vez en Euskadi en los últimos trece años. Según la última Encuesta de Población Activa, el abandono se situó en el 5,6% en 2022, ocho décimas más que el año anterior. Este índice se refiere al porcentaje de la población de 18 a 24 años que no ha completado el nivel de Educación Secundaria y que no sigue ningún tipo de formación. Aun así, no hay motivo de alarma puesto que Euskadi continúa siendo, con diferencia, la comunidad autónoma con menos ninis –jóvenes que ni estudian ni trabajan– de todo el Estado y sigue por debajo de la media de la Unión Europea (9,7%). Según fuentes del Ministerio de Educación, el leve retroceso se debe a la reactivación económica vivida por el fin de la pandemia lo que ha provocado que aumente el número de jóvenes que ha decidido abandonar su formación para acceder al mercado laboral.

Por su parte, el Departamento de Educación desconoce las causas que expliquen el leve repunte registrado el año pasado. No obstante, el dato avanzado ayer por el Ministerio de Pilar Alegría no preocupa al Gabinete que lidera Jokin Bildarratz porque “es casi imposible seguir bajando. No creo que haya mucha regiones europeas con un dato tan bueno como el que ha logrado Euskadi”, aseguran a NTM las mismas fuentes.

Datos: EPA - INE

El paso atrás ha sido generalizado en todo el Estado, que mantiene su tasa de abandono temprano en 13,9%, más del doble que el registrado en Euskadi. Tras dos años de pronunciada caída influida por la pandemia (1,2 y 2,7 puntos porcentuales en 2020 y 2021, respectivamente), la tasa se ha reajustado en 2022 con un ligero aumento (0,6 puntos ) respecto al año anterior y marca la segunda cifra más baja de la serie histórica. Desde 2012, la tasa de abandono temprano en España ha disminuido casi 11 puntos.

LOS MOTIVOS

Numerosos especialistas ligan la evolución positiva de este indicador en el Estado a las sucesivas crisis económicas, primero la de 2008 y después la producida por el coronavirus. En resumen, los jóvenes españoles se han decantado los últimos años por seguir estudiando ante la perspectiva de no trabajar. También podría haber influido la flexibilización del sistema educativo a partir de la ley Wert orientada en gran medida a maquillar, precisamente, las altas cifras de abandono del Estado, a la cola de Europa.

Aunque válidos, estos argumentos no se ajustan a la realidad vasca puesto que desde hace varios lustros el nivel educativo de la población (en todas sus franjas y hasta los 65 años) se sitúa a la altura de los países más desarrollados. Las claves del bajo abandono habría que buscarlas en el papel estratégico que la FP ha jugado las últimas dos décadas, en la alta tasa de escolarización temprana o en el amplio abanico de programas de refuerzo para detectar factores de riesgo y prevenir el fracaso escolar.

A todos estos factores estructurales se añade la alta consideración que la sociedad vasca atribuye a la formación, como lo demuestra la cuenta de gasto público y privado en educación. Según el Eustat, en 2020, en plena pandemia, este gasto creció un 0,2% con respecto al 2019. En cifras absolutas, se invirtieron 3.978 millones de euros en actividades educativas regladas y no regladas, 1.887 euros por habitante.

En 2017, último año disponible para hacer una comparativa internacional, el total de gasto por alumno medido en Paridad de Poder de Compra fue de 12.808 dólares en Euskadi de Primaria a Educación Terciaria, lo que le situó por encima de España (10.105), de la media de la OCDE (11.231), de la media EU23 (11.515) y de países como Francia (12.080), aunque por debajo de otros como Alemania (13.529) y Suecia (14.505).

Luz verde a la selectividad de este año: preguntas semiabiertas y de tipo test

Ayer se publicó en el Boletín Oficial del Estado (BOE) la Orden por la que se fija el contenido de la Evaluación de Bachillerato para el Acceso a la Universidad (EBAU) que por último año mantendrá el formato que se implantó durante los dos cursos pasados por la pandemia. Las fechas límite para realizar la convocatoria ordinaria deberán finalizar antes del día 16 de junio. Los resultados provisionales de las pruebas serán publicados antes del 30 de junio. Las pruebas correspondientes a la convocatoria extraordinaria deberán finalizar antes del día 14 de julio de 2023 y los resultados provisionales deberán ser publicados antes del 21 de julio.

El Ministerio argumenta el manteniemiento de este modelo porque el alumnado de 2º de Bachilleraro “ha cursado gran parte de su escolarización con restricciones y ha tenido que sortear dificultades que deben seguir teniéndose en cuenta a la hora de diseñar esta prueba”. Por todo lo anterior, al ministerio le parece “recomendable” mantener el diseño y las características del modelo de prueba de evaluación de Bachillerato que viene aplicándose desde el curso 2019-2020, con el objetivo de “evitar incertidumbres en la comunidad educativa y solventar posibles situaciones de desigualdad entre el alumnado que debe realizar este modelo de prueba por última vez en el presente curso y los que lo hicieron en las convocatorias inmediatamente anteriores”.

En la EBAU 2023 cada una de las pruebas contendrá preguntas abiertas y semiabiertas que requerirán del alumnado capacidad de pensamiento crítico, reflexión y madurez. Se podrán utilizar también preguntas de opción múltiple, siempre que en cada una de las pruebas la puntuación asignada al total de preguntas abiertas y semiabiertas alcance como mínimo el 50%. La preguntas de opción múltiple tendrán una sola respuesta correcta inequívoca y que no exigen construcción por parte del alumnado, ya que este se limitará a elegir una de entre las opciones propuestas.

Las preguntas semiabiertas tendrán respuesta correcta inequívoca y que exigen construcción por parte del alumnado, construcción que será breve, por ejemplo, un número que da respuesta a un problema matemático, o una palabra que complete una frase o dé respuesta a una cuestión, siempre que no se facilite un listado de posibles respuestas. Las preguntas abiertas exigirán construcción por parte del alumnado y no tienen una sola respuesta correcta inequívoca. Se engloban en este tipo las producciones escritas y las composiciones plásticas. Por otro lado, cabe recordar que el Gobierno vasco ha declinado participar este curso en la prueba piloto de la nueva selectividad. – I. A./NTM