La Audiencia de Gipuzkoa ha rechazado el recurso que el expresidente de la Real Sociedad Iñaki Badiola interpuso contra la sentencia que absolvió al exdirector de la Hacienda foral Pedro Mari Ruiz de Azua de un delito de prevaricación por un supuesto trato de favor al club donostiarra.

Aunque la Fiscalía no había presentado acusación alguna contra Ruiz de Azúa, éste fue imputado por Badiola, presidente de la Real Sociedad en 2008, por el supuesto trato de favor a esta entidad durante la investigación de irregularidades fiscales al haber remitido a la vía administrativa, en lugar de a la penal, el pago irregular, en concepto de derechos federativos y a través de paraísos fiscales, de las fichas de varios futbolistas entre los años 2004 y 2008.

No obstante, el exresponsable foral no fue encontrado culpable de este delito por el Juzgado de lo Penal número 2 de Donostia que lo absolvió el pasado mes de abril.

Contra esta decisión, Iñaki Badiola presentó un recurso de apelación que ha sido rechazado ahora por la Sección Primera de la Audiencia de Gipuzkoa, en una sentencia a la que ha tenido acceso EFE, por entender que la "motivación" de la resolución dictada inicialmente por el Juzgado de lo Penal es "perfectamente razonable", tanto "en relación a la valoración probatoria" como a "la subsunción jurídica" de los hechos.

El texto de la Audiencia, contra el que ya sólo cabe recurso ante el Tribunal Supremo, señala además que la actuación de Ruiz de Azua "no es subsumible en un delito de prevaricación" e insiste en que la sentencia de instancia no incurrió "en grosera contradicción" con el ordenamiento jurídico ni en "irracionabilidad" alguna.

El inicio de este procedimiento se produjo con una querella de Badiola tanto contra Ruiz de Azua (director de Hacienda en la legislatura 2007-2011), como contra el diputado de Hacienda en esos momentos, Pello González, el diputado de Deportes, Iñaki Galdos, y contra el actual diputado general, Markel Olano, y la subdirectora de Inspección Tributaria, María del Coro Pereiro.

En octubre de 2018, el juzgado que investigaba el caso archivó la querella, pero el expresidente realista recurrió ante la Audiencia de Gipuzkoa, la cual confirmó el sobreseimiento de las actuaciones respecto a todos los querellados, salvo Ruiz de Azua, quien se vio obligado a sentarse en el banquillo de los acusados los pasados 15 y 16 de diciembre, si bien finalmente fue absuelto en una decisión confirmada ahora por la Audiencia Provincial.