IRUN. El director de Inmigración del Gobierno Vasco, Xabier Legarreta, ha acusado a la policía francesa de practicar "controles selectivos y racistas" con los migrantes que intentan acceder al país vecino por la frontera de Irun.

En una entrevista en Radio Euskadi, Legarreta ha reconocido que la llegada de migrantes en tránsito (de paso hacia Francia, que no quieren quedarse en Euskadi) a la frontera de Irun ha aumentado de forma considerable desde 2018.

En esa zona, "hoy por hoy la mayor dificultad para atender a los migrantes en tránsito es el control racista que se viene llevando a cabo por parte de la Policía francesa en la muga de Irun", ha acusado.

"Son controles selectivos y racistas, que lo que provocan es que las personas que quieren cruzar la muga utilicen rutas menos seguras, arriesguen más su vida, y en ocasiones nos encontramos con fallecidos" (al intentar cruzar por el río Bidasoa).

Otra consecuencia, según Legarreta, es que "esos controles racistas lo que hacen es fomentar mafias que hacen negocio". "El Gobierno español es consciente de ello", ha añadido.

Legarreta ha admitido que "es muy difícil saber cuántas personas intentan cruzar". Sí han contado que en lo que va de año unas 4.500 personas han utilizado los recursos de atención a migrantes en la muga de Irun. Hay diversidad en su utilización: "unos usan este recurso solo para cargar los móviles y otros pasan una noche", ha detallado.

En cuanto a la reforma del Reglamento de Extranjería recientemente aprobada por el Gobierno español, un decreto que flexibiliza trámites para conceder autorizaciones de trabajo, el director de Inmigración y Asilo ha indicado que era necesario, y que se ha dado "un pasito hacia delante".

No obstante, cree que se siguen necesitando "más avances", como una mejoría en la burocracia, ya que resulta muy difícil conseguir una cita para cualquier gestión, agilizar la documentación y las homologaciones de los títulos, ya que "existen muchas personas con estudios universitarios que están trabajando en empleos de baja cualificación porque les cuesta conseguir la homologación".