Esan ha denunciado que los puntos morados establecidos en municipios vascos que se encuentran en fiestas, para facilitar información y atención a víctimas de agresiones sexuales, tampoco colaboran con la Ertzaintza y quieren hacer prevalecer sus propios protocolos cuando supuestamente se ha cometido un delito de este tipo.

Uno de estos puntos morados en el que se ha detectado "que ponen muchas pegas" a la hora de cooperar con los agentes, es el de San Sebastián, que sigue un protocolo consensuado con el Movimiento Feminista y Donostiako Piratak.

Fuentes de Esan han explicado a Europa Press que, después de denunciar lo ocurrido en el barrio getxotarra de Algorta, cuando dos responsables de una txosna "obstaculizaron" la labor policial ante un pinchazo que, al parecer, había recibido una joven de 16 años, tuvo conocimiento de que hechos similares estaban ocurriendo en puntos morados.

El sindicato teme que episodios como este se reproduzcan también en las fiestas de Bilbao, donde Bilboko Konpartsak ya ha anunciado un protocolo ante las agresiones sexuales que se puedan producir en el recinto festivo en la Aste Nagusia.

Esan ha criticado que se alegue desde las txosnas o puntos morados que tienen su propio protocolo de actuación, impidiendo la labor policial. A su juicio, "lo que no puede ser es que cada uno tenga el suyo" y que haya múltiples protocolos, cuando "el que hay que cumplir es el de la autoridad competente".

La central sindical ha celebrado que, después de que reclamara al Departamento de Seguridad que actuara ante sucesos como el de fiestas del Puerto Viejo de Algorta, este haya dado a conocer que investiga a dos responsables de la txosna por delito de desobediencia grave.

"Es lo que pedimos, que el departamento actúe contra estos grupos antisociales y totalitarios porque no se puede dejar a los jóvenes en manos de esta gente. Estos no pueden ser los tutores de nuestros jóvenes", ha reiterado.