El Real Automóvil Club Vasco Navarro (RACVN) estima que cada usuario de automóvil paga de media entre 885,21 y 3.040,55€ al año en impuestos desde que adquiere un vehículo nuevo y durante los diez primeros años de posesión de su vehículo. El club argumenta que se trata de una estimación de mínimos ya que no contempla los impuestos derivados del aparcamiento regulado en superficie, subterráneo o residentes, el pago de las actuales autopistas, la tasa de la ITV a las comunidades autónomas o las multas.
La estimación del RACVN se centra en los automóviles turismos y no toma en consideración los vehículos de transporte profesional de personas y mercancías y tampoco las motocicletas. Según el último censo publicado por la DGT (datos de 2020), España cuenta con un parque de 24.716.898 automóviles turismos y los impuestos que genera el automóvil recaudan cada año en España una cifra superior a los 55.000 millones de euros, convirtiendo al Estado en uno de los que mayor presión fiscal tienen de Europa. De hecho, España ocupa la cuarta plaza en el ranking europeo en lo que a recaudación de impuestos asociados al automóvil se refiere, sólo por detrás de Alemania, Francia e Italia, pero encima del Reino Unido.
Por otro lado, según ha explicado el RACVN en una nota de prensa, el argumento del Gobierno de que pague quien lo use abre un “peligroso precedente” contra los principios de justicia social y de solidaridad que se puede extrapolar a otros campos. “La medida que propone el Gobierno establece dos tipos de vías en función de la solvencia o clase social de los conductores. Considera que el que pueda pagárselo que vaya por las vías más seguras y el que no que recurra a las más peligrosas, sin importar la saturación que puedan soportar éstas, el peligro que pueda suponer y sobre todo el aumento de víctimas mortales que se pueda dar”, ha considerado.