Donostia. Las familias rumanas de etnia gitana asentadas en un campamento del barrio de Ergobia de Astigarraga, en la zona de Txalaka, temieron ayer lo peor durante algunos minutos. A las 13.45 horas, una de las chabolas prendió fuego y la espesa humareda provocó la huida de todas las personas residente en ese enclave. Según informó el departamento de Interior, las llamas fueron sofocadas por los bomberos en pocos minutos, lo que evitó que prendieran en otros barracones adyacentes. El suceso no produjo daños personales entre los residentes en ese punto, según destacó esta misma fuente. Foto: gorka estrada