El padre de la joven agredida en Andoain duda de que el autor se vaya a entregar

Donostia. Victorino Frutos, el padre de la joven de 18 años que el pasado viernes sufrió una brutal paliza y posibles abusos sexuales en Andoain, dijo ayer a Efe que teme que el presunto autor "no pague lo que le ha hecho" a su hija "por ser menor de edad". "No me parece nada bien que por ser menor pueda hacer lo que quiera y no pagar por ello", señaló Frutos, que se mostró convencido de que la minoría de edad del presunto autor de los hechos tendrá como consecuencia que, si es detenido, "entre por una puerta y salga por la otra".

El padre de la joven, que evoluciona favorablemente en una habitación de planta del Hospital Donostia y podría ser dada de alta en tres o cuatro días, afirmó que la madre del presunto agresor, un joven de origen gitano, ha difundido una carta en la que asegura que su hijo se entregará a la Fiscalía de Menores.

"No me lo creo -dijo-, pero si lo hace será porque sabe que, al ser menor, saldrá enseguida, y todo quedará, como se suele decir, en agua de borrajas". El padre exige que, "al menos, lo metan en un reformatorio y cumpla allí los años que sea por lo que le ha hecho".

Por su parte, el Departamento de Interior apuntó que la Ertzaintza continúa la búsqueda del presunto agresor.

Asimismo, Victorino Frutos explicó que el presunto agresor entró a formar parte de "la cuadrilla" de su hija "hace poco" y que el pasado 28 de mayo "celebraron su 18 cumpleaños", extremo que, sin embargo, la Ertzaintza le ha comunicado que es falso, ya que en los archivos policiales consta que no cumplirá su mayoría de edad hasta el próximo enero.

En cuanto a los presuntos abusos sexuales que padeció su hija, indicó que, a la espera del informe oficial forense, los médicos del Hospital Donostia les han informado de que, "en principio, no hubo violación".

Lo que ha contado la joven, "que como es natural no se acuerda bien de lo ocurrido", es que "intentó violarla, ella se opuso, hubo un forcejeo y la agarró por el cuello, ahogándola hasta que perdió el conocimiento", reprodujo el progenitor.

Según la información facilitada por Interior, los hechos sucedieron en la madrugada del viernes, cuando la chica regresaba a su domicilio tras haber pasado la noche con sus amigas en las fiestas de San Juan de Andoain, y fue abordada por un varón que la condujo a un garaje, donde la agredió. La joven, que fue hallada a primera hora de la mañana del viernes inconsciente en una zona de huertas, presentaba la mandíbula partida y un edema cerebral. Tras pasar cuatro días en la UCI, el lunes pasó a planta, donde se recupera favorablemente.

El padre precisó que su hija, a la que ayer por la tarde hicieron un nuevo escáner para ver si el edema cerebral evolucionaba de forma favorable, tiene un collarín especial para ayudar a soldar la mandíbula, aunque debe "hablar lo menos posible" y no puede masticar, por lo que sólo puede comer "líquidos y purés".

Acusación particular Por otro lado, el Ayuntamiento de Andoain confirmó ayer que el Consistorio se personará como acusación particular. "El Ayuntamiento apoyará a la familia hasta el final", afirmó el primer teniente de alcalde de Andoain, José Luis Vela (PSE-EE).

Además, Vela añadió que el lugar en el que ocurrieron los hechos no es "especialmente" problemático. "Ha habido quejas puntuales de vecinos pero parece que esta situación ha encendido las ánimos. De todos modos, el Plan General -que se aprobará dentro de unas semanas- contempla la regeneración de la zona: el derribo de las casas y la reubicación de los vecinos", aseveró.

Por su parte, el concejal del PNV, Gurutz Irigoras, apuntó que "por desgracia ha ocurrido lo que ha ocurrido en ese lugar pero no es una zona conflictiva".