Errenteria. Al chef donostiarra Andoni Luis Aduriz no se le va la cara de preocupación y sigue mirando su cocina, totalmente calcinada, un día después de la tragedia sin todavía creérselo del todo. Confesó que fue un impacto y que nunca había creído posible que esto pudiera ocurrir. Ahora toca hacer balance, hablar con el seguro y decidir qué ocurrirá con la gente que tenía reservas. Le han ofrecido espacios para llevar a cabo esos compromisos, ya que el Mugaritz también incluye servicios de banquete de bodas. Le toca tomar decisiones y afrontar con fuerza una situación cruel que ha truncado doce años al frente del Mugaritz, el cuarto mejor restaurante del mundo.
- Multimedia
- Servicios
- Participación
