Iker Kortajarena es inteligente, como lo acreditan sus estudios, educado, encantador y cauto. Además de valiente, porque ha decidido buscarse la vida fuera en lugar de seguir en el Sanse sin apenas opciones de subir al primer equipo.
Ocho bajas en el Sanse. Parecen muchas.
No sé si muchas o pocas, pero la mayoría son por edad. Es algo que se veía venir. Varios pasábamos de 23 años como Arambarri, Ezkurdia, Gabilondo…
Se están colocando bien y rápido.
Sí, es una pasada. Sí se puede salir así… Lo veo y pienso ¿quién diría esto a principio de temporada? Es increíble como nos colocamos o nos lo ganamos.
La mayor sorpresa ha sido la suya.
He tenido la opción de dar el salto al fútbol profesional y no me lo he pensado. Tengo una ilusión terrible, es otro sueño ser parte del fútbol profesional.
¿Se ha llevado un disgusto?
Yo creo que era el momento por el año que hemos hecho colectiva e individualmente, con las puertas del primer equipo prácticamente cerradas y no siendo sub’23, lo que te impide la opción de ir convocado en la Liga y podría decir que nos va a salir bien.
Olabe le ofreció seguir.
Sí, hablamos después del partido del Alcorcón y me dijo que la idea del club es que fuese uno de los veteranillos del Sanse. Pero me dejó claro que no me iba a prometer nada ni me iba a vender la moto; era para seguir en el filial con las puertas cerradas.
“Que nadie se equivoque; yo estoy muy agradecido a la Real por el trato que me ha dispensado y por la oferta que me ha hecho para seguir"
O sea, Sanse y la opción de jugar en la Champions.
(Risas) Sí, pero seguro que iba a jugar mucho yo en toda una Champions…
¿Y pretemporada con el primer equipo?
No, ni eso. Pero oye, que nadie se equivoque, yo estoy muy agradecido a la Real. El trato ha sido súper bueno, me han dado tiempo para pensarlo y les agradezco que me hayan hecho una oferta para seguir.
Desde fuera, a los que seguimos el fútbol de Zubieta nos ha llamado la atención que siempre ha ido como un poco por detrás de lo esperado.
No sé. La realidad es que en mi puesto ha habido mucha competencia. Muchos jugadores y muy buenos. Veía a los que tenía delante y lo podía entender a pesar de que creo que sí he hecho años buenos en el C y que podía haber dado el salto antes al Sanse, lo que me hubiese traído más opciones de otra cosa. Yo tenía la ilusión de ir al filial, y reconozco que algunos años me he llevado un poco de chasco, pero también sé que justo cuando en teoría iba a subir, el Sanse ascendió a Segunda y entonces se puso más difícil. Subir a Segunda B, bueno, pero para Segunda en ese momento era un gran salto. Pero siempre he percibido que había mucha competencia y me lo he tomado con naturalidad.
“He estudiado Ingeniería de Energías Renovables y este año he hecho el máster en profesorado; no descarto hacer periodismo deportivo”
¿Se puede decir ya que va a Huesca?
Estamos hablando. Estoy contento y me haría mucha ilusión. Sería como un sueño.
¿Le da vértigo?
Bueno, un poco de miedo o de respeto sí, porque es la primera vez que salgo de casa, por irme a vivir solo… Por si juego o no juego…
¿Conoce a alguien?
A Jeremy Blasco. Ya he hablado con él y que lo que necesitara... Veremos.
¿Tiene más ofertas de Segunda?
Ha habido otros equipos que han manifestado interés.
¿Y del extranjero?
Yo estoy abierto a todo, pero tenía claro que la Segunda era mi sueño en España. Quiero probar en esa categoría, me quedé con ganas en el Sanse.
Ya estuvo muy cerca de salir cedido al Calahorra en enero de 2022.
Hubo interés, pero yo no podía salir en ese momento porque hubiese tenido que repetir curso al estar haciendo unas prácticas. Yo he estudiado Ingeniería de Energías Renovables en Mondragón y este año he hecho el máster en profesorado. Un habilitador para ser profesor. Soy un buen estudiante, me gusta.
Con ese nivel, se saca la carrera de periodismo en dos años.
Es que no la descarto. El año que viene seguro que haré algo, tengo muchas cosas en la cabeza y como voy a vivir solo... Muchos ratos de soledad; lo que me gustaría es organizarme y despejar la cabeza del fútbol. Estoy mirando muchas cosas, hasta periodismo deportivo. Siempre me ha gustado. Me fliparía ir a cubrir una final de Champions y escribir la crónica. Viajar y ver partidos.
En el club les encanta recordar que fuera de la Real hace mucho frío.
Hombre, las condiciones son muy increíbles y las instalaciones y el trato son muy buenos. Pero también creo que hay mucha gente que ha salido y está muy bien. Por ejemplo, Jeremy, Aldasoro, Roberto López… Sí que hace frío, pero algunos están muy contentos. Yo tengo claro que si no tomo esta decisión de tirar para adelante, me arrepentiría.
El nuevo Sanse va a tener que reinventarse.
Sí, va a cambiar mucho. Las ocho bajas, más los dos o tres que pueden subir al primer equipo. Conozco bien a todos los que van a ascender del C y quedará un buen grupo. Gente que viene jugando y otra que no ha participado tanto este año pero que puede ser muy importante.
Es dura la vida de un mediocentro en la Real…
Sí, bueno, yo diría que es bonita, pero es que hay muchos.
¿Por qué cree que salen tantos?
Se trabaja mucho el balón. Al final, eres el centro del juego y como la Real tiene mucho estilo de posesión y combinativo.
¿Usted llegó pronto a Zubieta?
No, a mí me costó llegar. Era mi gran sueño y me costó mucho. Yo llegué en el segundo año juvenil. Jugué en el Oiartzun, en el Real Unión y en el Antiguoko. Antes venía mucho a entrenar como un externo, desde alevines. Cuando llegué ya jugaba de mediocentro y se trabaja mucho específicamente. Yo iba a hacer lo que fuese por entrar en Zubieta y al final lo conseguí.
¿Le ha impresionado ver que Turrientes apenas ha jugado?
Bueno, yo es que no he tenido ni la opción de pasar un año así. Si me hubiesen planteado eso, yo creo que me quedaría, seguro además. Estar en el primer equipo es lo más. Luego cuando estás ahí siempre quieres más. Turri seguro que quiere más. Como Urko, que tiene unas condiciones impresionantes, u Olasagasti.
¿Cuál es su puesto ideal, como se definiría?
Me considero mediocentro en general, puedo jugar en todas las posiciones del centro del campo.
Merino siempre ha dicho que él es mediocentro.
Pues mira, es uno de mis grandes ídolos. Salvando las distancias, sí que me identifico con su forma de jugar. Llegador, físicamente fuerte, no voy mal de cabeza…
¿Le ha ayudado tener genes deportivos de elite? Su ama, Itziar, es una leyenda en el Oiartzun.
Mi aita jugaba a balonmano, en el Ereintza. Y mi ama es Itziar, una leyenda en el Oiartzun. Es la que más me sigue, la que más me riñe. Ella jugaba de delantera, extremo. Estilo Amaiur me suele decir ahora. Ojalá le hubiera visto jugar algún día; esa entrada sí que la hubiese pagado encantado (risas). Le encanta el fútbol y es la que más me ha corregido.
¿Se ha disgustado por su baja?
Bueno, en casa me han apretado para que me quedase. Me han dicho que como aquí en ningún lado, que la Real siempre ha sido lo más… Los tres querían que me quedara. En marzo me contaron el interés de un Segunda, pero sin una oferta concreta sobre la mesa. Cuando no tienes nada, es diferente, pero ahora que la Real nos había comunicado que quería que siguiese pues era distinto, porque ya contaba con algo. Me lo dijo Olabe en Alcorcón. Para mí fue como para darles las gracias, de verdad, gracias, porque estábamos nerviosos en casa al acabar contrato.
Su hermano juega en el Oiartzun y ha peleado por el ascenso a Tercera.
Sí, él es extremo, es más pequeño y más rápido que yo. Suelo ir a verle mucho. Tiene dos años menos.