Asier Illarramendi fue el único de los jugadores realistas que salió a la zona mixta para atender a todos los medios de comunicación presentes. Cariacontecido y cansado, el mutrikuarra ejerció de capitán y no eludió ninguna pregunta, aunque le costó bastante encontrar explicaciones al resultado y argumentos convincentes para hacernos creer en la remontada: “No hemos conseguido el resultado que queríamos. Viendo el partido en general, creo que ha sido igualado. Es verdad que los partidos se deciden en las dos áreas y quizás ahí no hemos estado del todo acertados. Tampoco nos han concedido mucho pero ellos han acertado de cara a gol y nosotros las dos claras que hemos tenido no hemos acertado. Al final, cuando pierdes siempre hay errores que corregir, corregirlos y a seguir adelante”.

Una contra al principio y un córner al final. Su plan salió perfecto. Igual algunos infravaloraron el potencial del rival en parte debido a lo atractivo del destino: “Enfrente tenemos un equipo italiano y de entrenador a Mourinho. Sabíamos que iba a ser un partido difícil, contra jugadores veteranos, experimentados, que teníamos que aprovechar nuestras ocasiones porque al final la Roma tampoco concede mucho. Creo que en general hemos estado bastante bien pero nos ha faltado algo, sobre todo contundencia en las dos áreas, donde ellos han estado mejor”.

La salida de los jugadores del equipo italiano por la zona mixta era impresionante. Grandes, fuertes, con plantas imponentes… Una vez más el factor físico fue diferencial en una contienda Europa: “Es verdad que quizás en los duelos han estado mejor, pero en general no hemos hecho un mal partido. Enfrente teníamos jugadores experimentados, fuertes, que defendían bien, solidarios, que trabajaban todos juntos… Pero aun así, creo que el equipo no ha estado del todo mal y es verdad que al final el resultado es duro pero por suerte queda la vuelta y trataremos de remontar la eliminatoria”.

Imanol fue muy duro en caliente al afirmar que “estos partidos nos siguen quedando grandes”. Fue su reacción ante el segundo tanto encajado en un remate de cabeza a un metro de la línea de meta a saque de un córner perfecto de Dybala: “No estoy de acuerdo que nos quedan grandes estos partidos. Confío 100% en este equipo. No hemos conseguido el resultado que queríamos pero por suerte queda la vuelta. Quedan 90 minutos delante de nuestra gente, de nuestra afición y entre todos vamos a sacarlo adelante”.

La afición se las prometía muy felices, pero no han sido días sencillos para ella. Con muchos problemas en los vuelos para llegar hasta Roma y por el desenlace del choque con un doloroso 2-0, con un gol al principio, que le amargó el partido y otro al final, que fue un mazazo demoledor. Illarra sabe que están en deuda con ella: “La afición se lo merece. Hoy también han estado animándonos los 90 minutos a tope y es una pena no darles esa alegría que queríamos ofrecerles y desde aquí darles las gracias y decirles que queda la vuelta todavía y que entre todos sacaremos el partido adelante sí o sí”.

Los realistas estaban dando por buena la derrota por la mínima a pesar de que Merino había tenido el empate en el minuto 82: “Duele sobre todo porque con 1-0 la eliminatoria estaba más viva. Con un 2-0 será más difícil pero confío 100% en el equipo, en la afición que siempre nos ha apoyado y nos apoyarán el jueves que viene”.

Dicen que las remontadas tienen que nacer en el mismo vestuario, con el dolor de la derrota aún reciente: “Claro que ha habido gritos y ánimos. A todos nos duele perder un partido así y más en Europa, pero hay que levantar cabeza. Es verdad que hemos acabado un poco tristes, dolidos, pero hay que pasar página, tenemos otro partido el domingo, quedan solo tres días, debemos recuperar fuerzas para ganar porque últimamente en la Liga también estamos fallando un poco más”.

El segundo gol estaba muy reciente y la postal del vestuario era deprimente: “Al final la gente está dolida por ese segundo gol. Todos queríamos ganar, conseguir un buen resultado para la vuelta y ese segundo gol nos ha dolido un poco más. Por suerte, queda ese partido de vuelta.

No fue fácil para los jugadores acercarse a la esquina donde estaban sus seguidores que, a pesar del disgusto, no dudaron en agradecer su esfuerzo y el detalle de acercarse para aplaudirles: “A todos nos da pena. Todos queremos ganar y más por la afición, la gente que lo sufre como nosotros. Últimamente estamos fallándoles entre comillas, a pesar de que estamos dando el 100% no estamos logrando los resultados que queremos y al final todavía quedan tres meses y entre todos tenemos que conseguir los objetivos que queremos”.

Illarra no vio ninguna necesidad de lanzarles un mensaje para que no les fallen el jueves y convertir Anoeta en una auténtica caldera: “Ya sé que no van a fallar así que nosotros tampoco”.