Un empresario holandés convierte un viejo avión en un hotel de lujo

El empresario holandés Ben Thijssen ha decidido convertir un viejo avión ruso, un Ilushin 18 de la década de los 60, que perteneció al expresidente alemán Erich Honecker, en un hotel de cinco estrellas al que ha denominado Hotel Honecker. Gracias a este establecimiento, los turistas podrán disfrutar de una noche de avión sin despegar del suelo en una suite de 400 metros de largo. El alojamiento en este avión cuesta 350 euros la habitación doble para dos personas, aunque también está pensado como lugar de reuniones de unas quince personas bajo petición expresa. El hotel-avión cuenta con un sauna, cocina, televisiones de pantalla plana con reproductores de Blu-Ray, Internet sin cable y otros detalles de lujo. El empresario descubrió el avión en Harbke (Alemania), donde se ha llegado a utilizar como restaurante. Thijssen invirtió unos 450.000 euros para reconvertir al avión que había comprado como chatarra por 19.000.