El vicepresidente de la Junta de Castilla y León, Juan García-Gallardo, de Vox, ha confirmado este viernes en rueda de prensa en la sede del Gobierno autonómico su dimisión en el Ejecutivo en el que tomó posesión el 20 de abril de 2022, salida que adopta fruto de una decisión "reflexionada" y que "no ha sido fácil".

"Es una decisión que, como se pueden imaginar, no ha sido fácil, pero no por ello poco meditada, si no que he venido reflexionando en los últimos días con los acontecimientos que han ido presenciándose en el debate regional, pero también en el debate a nivel nacional", ha explicado García-Gallardo que ha asegurado que el presidente nacional del PP, Alberto Núñez Feijóo, no les ha dejado alternativa, lo que ha llevado a tomar una decisión que, en su caso, "ya estaba tomada" el miércoles, si bien ha esperado a anunciarla en una "decisión colegiada" del partido.

En su comparecencia ante la prensa Juan García-Gallardo se ha reivindicado como un "hombre de palabra" y de "honor" y ha asegurado que se va del Gobierno de Castilla y León "con la cabeza alta" tras haber cumplido su compromiso con los electores y la palabra que habían dado en el objetivo de los de Santiago Abascal de "cortar de raíz" el efecto llamada "para proteger la seguridad y la convivencia a la sociedad española de las futuras generaciones".

"Creo que en Castilla y León estamos a tiempo de corregir esto, creo que no estamos condenados a padecer una inmigración ilegal, no estamos condenados a la islamización. España aún está a tiempo de salvarse", ha añadido en su reflexión en la que se ha vuelto a cargar contra el "falso buenismo".

"Nosotros hemos sido claros durante las últimas semanas, hemos sido contundentes con cuál iba a ser nuestra respuesta. Muchos no nos dieron credibilidad, pero aquí estamos cumpliendo nuestra palabra, que, por desgracia, es algo que creo que no se ve con frecuencia dentro de la clase política", ha añadido en la explicación de los motivos de su salida del Gobierno de Castilla y León.

El vicepresidente ha dado "las gracias, las gracias y las gracias" a los miembros del equipo que le han acompañado en estos dos años en el Gobierno de Castilla y León. También ha traslado su "agradecimiento personal", su "afecto" y su "cordialidad" al presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, a quien ha entregado en mano este viernes su carta de dimisión.

"Nos hemos podido despedir con cariño y con afecto el que nos hemos proferido durante los dos últimos años, con respeto institucional y con colaboración leal, buscando el mejor interés de la comunidad de Castilla y León", ha aseverado al respecto.

García-Gallardo se ha comprometido a actuar ahora desde la oposición "con responsabilidad y con altura de miras" y sobre las cuestiones individuales ha abogado por "hacer camino al andar" y ha rechazado anticipar la posición sobre algún tema en particular. "Hasta ahora hemos tenido una generosidad y una lealtad infinitas con el Partido Popular aceptando algunas cuestiones que, de partida, no hubiéramos aceptado. A partir de ahora pues hay que negociar efectivamente individualmente cada una", ha concluido. 

Cesados dos de los tres consejeros de Vox

Por otra parte, García-Gallardo ha expresado su deseo de que los tres consejeros de Vox en el Gobierno autonómico den "un paso a un lado y presenten también su dimisión", una intención que sí le han transmitido los titulares de las consejerías de Industria, Mariano Veganzones, y de Agricultura, Gerardo Dueñas.

Minutos después, el presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, ha cesado a los consejeros de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural y de Industria, Comercio y Empleo, ambos de Vox, pero ha mantenido al de Cultura, Turismo y Deporte, un perfil independiente, por contar con su "confianza personal".

En su intervención este viernes en una rueda de prensa después de aceptar la dimisión que le ha presentado el ya exvicepresidente de la Junta, Juan García-Gallardo (Vox), Fernández Mañueco ha anunciado una reestructuración de su Gobierno, con la eliminación de la Vicepresidencia, que asumirá la consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades, y la entrada de dos nuevas caras al Ejecutivo autonómico.

El vicepresidente y el consejero de Vox en Murcia presentan su dimisión

Por su parte, el vicepresidente de Murcia, José Ángel Antelo, y el consejero de Fomento, José Manuel Pancorbo, presentarán este viernes al presidente autonómico, Fernando López Miras, su dimisión tras la ruptura anoche por parte de Vox del acuerdo de gobierno firmado en septiembre de 2023 con el Partido Popular.

En rueda de prensa en la sede de la Consejería de Interior, que también ha dirigido estos últimos diez meses, y acompañado por Pancorbo, ha dicho que las dimisiones afectarán a todos los altos cargos de la administración autonómica de su partido, y que él pasará a la oposición y mantendrá su escaño en la Asamblea Regional de Murcia. El titular de Fomento volverá a la actividad privada.

Sobre los pactos municipales suscritos para el gobierno de 8 ayuntamientos, entre ellos, tres de los cuatro de mayor población (Cartagena, Lorca y Molina de Segura), el también presidente provincial de Vox ha subrayado que ordenará su ruptura si "colaboran con la inmigración ilegal", como argumenta que ha ocurrido con el PP a nivel autonómico.

"Donde está Vox no se colabora con la inmigración ilegal y si se hace es porque no está Vox", ha dicho Antelo tras calificar a Murcia como "la Canarias de la península, la segunda provincia con mayor entrada, donde no se puede mandar el mensaje de que toda África cabe en la región".

En su opinión, se ha incumplido el acuerdo firmado el 5 de septiembre pasado para la investidura de Fernando López Miras a pesar de que no alude a los menores inmigrantes cuyo reparto ha provocado la ruptura, y que en su artículo 15 dice literalmente: "Apostamos por la coordinación de las Policías Locales y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado para prevenir la delincuencia, erradicar con eficacia la acción de las bandas organizadas y luchar contra las mafias de la inmigración ilegal".

A preguntas de los periodistas, el vicepresidente ha contestado tajante: "El punto 15 dice 'no colaborar' con la inmigración ilegal" y el PP es el "responsable" de lo ocurrido.

Según José Ángel Antelo, "una cosa es lo que se dice y otra lo que se vota, y en este caso es totalmente contradictorio hacerlo a favor del acogimiento de menores aunque los servicios sanitarios sociales estén saturados".

También se ha referido a las conversaciones mantenidas en las últimas horas con Fernando López Miras al afirmar que tanto él como el presidente valenciano, Carlos Mazón, "han intentado que no sucediera lo que ha sucedido", y ha confesado que al jefe del Ejecutivo murciano "le fue difícil evidentemente" explicarle "por qué habían cambiado de posición en el último momento, y cuando su consejera dijo que no podían acoger más menores en Murcia".

"Lo más valioso es la palabra dada y no la incumplimos. Es verdad que queda un gobierno débil y lo mejor es que se elija un modelo, el francés o seguir respetando el orden y sostener que a España se viene a generar empleo y riqueza, a mantener el orden y a respetar y entender que hombres y mujeres somos iguales ante la ley", ha señalado sin dejar claro si era partidario de adelantar elecciones, pese a ser preguntado por ello.

"Seguimos en la oposición" en el Parlamento autonómico, donde votarán "a favor de lo que sea correcto" y donde queda en el aire la elección prevista de un comisionado de la Transparencia la próxima semana con un nombre propuesto por Vox, según lo acordado con el PP y que ha supuesto la eliminación del anterior Consejo de la Transparencia.

También ha subrayado que el Gobierno de Murcia se constituyó "tras el boicot" del presidente nacional del PP, Alberto Núñez Feijóo, en el último momento, a punto de vencerse el plazo para repetir forzosamente las elecciones autonómicas de 2023.

Tras citar el reparto de vocales del Consejo General del Poder Judicial que ha pactado el PP con el PSOE y los futuros acuerdos que quedan entre los dos partidos mayoritarios en el Congreso de los Diputados en distintos organismos, ha calificado a Feijóo de "un problema grave, el mejor ministro de Pedro Sánchez, que vive constantemente salvándolo".