El Gobierno español protestará ante la prohibición de Israel al consulado en Jerusalén de prestar servicio a los palestinos. El ministro israelí de Exteriores, Israel Katz, dio instrucciones para cortar la conexión entre la embajada de España en Tel Aviv y los palestinos, así como prohibir al consulado español en Jerusalén “prestar servicios a los palestinos en Cisjordania”.

Albares

El ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, señaló que analizarán en qué se traducirá el anuncio y avanzó que “si eso es una decisión, tal y como se lee de la literalidad”, entonces el Gobierno protestará, enfatizando la voluntad del Ejecutivo español de que el consulado en Jerusalén mantenga el contacto con los palestinos y que la ayuda gubernamental siga llegando: “Nadie nos va a atemorizar ni nos va a hacer rebajar nuestro discurso”.

El ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares. EP

Por ello, reiteró la apuesta por el reconocimiento del Estado palestino, la petición del alto al fuego, la liberación de los rehenes y la llegada de la ayuda humanitaria en Gaza: “No permitiremos que nadie por su sobreactuación nos enturbie esa conversación, que es la que debe de tenerse”.

Servicios a los palestinos

Preguntado sobre cómo Israel puede impedir que el consulado español en Jerusalén preste servicios a los palestinos y si ello supondría controles policiales para comprobar quién entra y sale del consulado, Albares manifestó: “Nada más salir de aquí, voy a contactar a mi equipo y vamos a analizar y ver de qué se trata. No quiero entrar en mayores valoraciones, pero desde luego ya le adelanto que si hubiera algún tipo de acción de ese estilo nosotros, desde luego, vamos a protestar”.

“Protestar es una acción diplomática concreta que se puede desarrollar de muchas maneras. Hay muchas formas de hacerlo, desde una nota verbal hasta llamar a consultas a un embajador. Hay una gama muy importante para hacerlo y estoy analizando, también con los otros dos países reconocedores, Noruega e Irlanda, las medidas que pudiéramos adoptar”.

En cuanto a la crítica dirigida hacia la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, por parte del ministro israelí, por haber defendido una Palestina “desde el río hasta el mar”, Albares recalcó que “en el Gobierno de España no hay antisemitas” sino que es “un gobierno tolerante, plural, diverso que no acepta ningún discurso de odio, incluido el antisemitismo”. “Los españoles judíos son una parte fundamental de la población española y por supuesto las actitudes antisemitas no solamente no tienen cabida sino que desde el Gobierno de España las combatimos”, acotó. “No le tengo que decir a la vicepresidenta lo que debe hacer o dejar de hacer”, zanjó.