La secretaria de Movimientos Sociales de ERC, Marta Molina, aseguró ayer ante el juez de la Audiencia Nacional Manuel García Castellón que Tsunami Democràtic fue un movimiento pacífico que no incitó a la violencia y “mucho menos” a cometer actos terroristas.

Así lo confirmó su abogada, Marina Roig, que explicó que en su declaración como investigada Molina ha asegurado que todos los mensajes que envió la plataforma independentista fueron “llamadas a la no violencia y a la desobediencia civil”.

Movilización pacífica

Según su letrada, la dirigente de ERC insistió en que lo único que se alentó fue a una “movilización pacífica de la ciudadanía”. “Por tanto ha defendido que no fue un movimiento violento y mucho menos terrorista”, añadió, señalando que Molina detalló que “jamás ha emitido ningún comunicado o ningún mensaje invitando a la violencia”.