donostia - Los abogados Arantza Zulueta y Jon Enparantza, condenados por integración en ETA como miembros del frente de makos, quedaron ayer en libertad tras ser excarcelados de las prisiones de Picassent (Valencia) y Estremera (Madrid), respectivamente, según informo la asociación Etxerat.
Este organismo confirmó que ambos letrados ya se encuentran en libertad tras permanecer en prisión cuatro meses y medio. Zulueta se encontraba en Picassent desde el pasado noviembre, cuando fue trasladada a esta cárcel desde la prisión alavesa de Zaballa. Enparantza, por su parte, se encontraba en la prisión madrileña de Estremera y fue recibido en El Antiguo pasadas las 20.00 horas.
Estos dos abogados fueron los dos únicos de los 47 miembros condenados por integración en organización terrorista que fueron a prisión. Los 47 acusados de integrar el frente de makos o cárceles de ETA, entre los que se encontraban la también letrada y edil de Iruñea Amaia Izko y el exsenador Iñaki Goioaga, se conformaron con penas leves de prisión, evitando ir a la cárcel, a cambio de reconocer su labor para el frente de makos de ETA, si bien los principales acusados estarán un año en libertad vigilada. Esta decisión tuvo diversas consecuencias, como en el caso de Izko, que pese a haber sido elegida concejal por EH Bildu en mayo, tuvo que renunciar al acta de la capital navarra.
Las mayores penas (3 años y medio y 2 años y 7 meses de cárcel, respectivamente) recayeron en Zulueta y Enperantza, que la sentencia consideró responsables del órgano KT (Koordinazio Taldea). Los dos se enfrentaban a una petición de la Fiscalía de 14 años de cárcel por participación activa en organización terrorista en grado de dirigente.
Una vez notificada la sentencia del caso, a la que se llegó tras un acuerdo de conformidad entre las defensas y las acusaciones, los dos abogados ingresaron de forma voluntaria en la prisión de Zaballa el pasado 30 de septiembre.
En el caso de Enparantza, fue recibido en El Antiguo donostiarra por varias decenas de personas en un acto que duró apenas cinco minutos y contó con un aurresku y un bertso sobre su vuelta a la libertad. - Efe/N.G.