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"El ensañamiento fue grande, porque Eibar era un símbolo"

"El ensañamiento fue grande, porque Eibar era un símbolo"J. C

eibar. Gutiérrez es autor de libros como La Guerra Civil en Eibar y Elgeta (2007), además de miembro de la asociación Intxorta 1937

Llama la atención que Eibar cayera en abril, mes en el que, seis años antes, se proclamó la II República. Existen dos fotos muy representativas, tomadas prácticamente en las mismas fechas, pero con seis años de diferencia. En una se ve la plaza Unzaga llena de gente, rebosante de alegría e ilusión. Hay otras fotos, del 27 de abril de 1937, en las que se ve al general Mola con los requetés que han tomado la misma plaza. El ayuntamiento, antes todo color y algarabía, está prácticamente destrozado.

Durante la Guerra Civil el valle del Deba adquirió un simbolismo especial. ¿Por qué? Después del alzamiento militar, para finales de septiembre prácticamente toda Gipuzkoa estaba tomada por los sublevados y los siguientes siete meses solamente Eibar y Elgeta mantuvieron el ataque. En esta zona se creará la primera gran resistencia. De hecho, el Estatuto del 7 de octubre de 1936 en algunos ámbitos es conocido como Estatuto de Elgeta, porque las batallas del 4 de octubre permitieron que por primera vez los rebeldes sufrieran una derrota en manos del ejército vasco, que aún no existía como tal formalmente.

El frente fue roto en abril de 1937. ¿Cómo influyeron los bombardeos que se conmemoran estos días? A finales de marzo del 37, con la derrota de los italianos en Guadalajara, los generales Franco y Mola decidieron que había que acabar con la guerra del Norte. Antes, Mola ya se había encargado de lanzar desde los aviones las famosas octavillas en las que afirmaba tener medios probados para arrasar Bizkaia. El día referencial fue el 31 de marzo, en el que 337 personas murieron en el bombardeo de Durango. En las siguientes semanas atacaron a sangre y fuego.

¿Fue decisiva la intervención de la aviación italiana y alemana? Fue absoluta la superioridad aérea de sus aviones, al servicio de los sublevados. La República no tenía medios para enviar refuerzos; contaba con algunos pocos aviones, pero prácticamente en esas fechas la aviación alemana e italiana no tuvo oposición. Bombardearon con total impunidad. Operaron desde el aeródromo de Lakua, en Gasteiz, fundamentalmente. Y también tenían bases en Logroño, Soria y Burgos.

¿Por qué no llegaron refuerzos para la defensa? A pesar de que el lehendakari Agirre solicitó a Indalecio Prieto,ministro de Marina y Aire, el auxilio de aviones de la República, era imposible que llegasen. El Gobierno español afirmaba que la aviación tendría que atravesar zonas enemigas, además con una autonomía de vuelo limitada. Esto suponía sacrificar muchos aviones que iban a hacer falta en otras posiciones. Incluso se intentó que transitaran hasta aquí a través de Francia, pero la supuesta neutralidad de los países europeos entre ellos Alemania e Italia hizo que esta posibilidad fuese desbaratada.

¿La población civil se convirtió en objetivo militar directo de forma consciente? Las operaciones fueron dirigidas por los generales Sperrle y Von Richttofen. Hay documentos escritos en los que se ve que la población civil va a ser objetivo militar, algo que hasta entonces no ocurría. Por primera vez en la historia, alemanes e italianos van a ensayar las tácticas militares que luego pondrán en práctica en la II Guerra Mundial. Es decir, bombardeo sistemático de objetivos para que luego entre la infantería. Más concretamente, enviaban por delante a las tropas regulares de Tetuán, que operaban en esta zona de Elgeta.

¿Cómo se encontraba Eibar antes de sufrir los bombardeos definitivos, los días 24 y 25 de abril? En septiembre de 1936 se ordenó una primera evacuación, porque pensaban que la caída era inminente. En enero de 1937 hubo otra. Para entonces fundamentalmente estaba habitado por soldados. El batallón emblemático fue el Amuategui, formado principalmente por socialistas eibarreses. También se asentaban diferentes batallones de adscripción nacionalista y anarquista.

La mayoría de los ciudadanos, por lo tanto, habían abandonado la ciudad. Eibar se encontraba medio vacía, militarizada con los soldados que defendían la ciudad y los pocos servicios que se podían hacer. Los soldados comían en el frontón Astelehena. También hay datos curiosos. El batallón Amuategui creó una banda de música de 36 miembros, que daba conciertos en el quiosco de la plaza Unzaga durante la guerra. También había tres sesiones de cine todos los días y editaban un periódico (Voz Miliciana). Se organizaban debates y bailes mientras se escuchaban los tiros.

¿Qué fuerza tuvieron los bombardeos de Eibar los días 24 y 25, a la luz de las últimas investigaciones que ha realizado? El 25 fueron siete aviones y cada uno podía llevar hasta una tonelada. Echaron 21 bombas de 100 kilos pueden destrozar una casa de cuatro pisos sin ningún problema y 103 de 50 kilos. Todo ello desde 1.500 metros. Los siete aviones suman 7.200 kilos en bombas el día 25; iban a tope de capacidad.

¿Cómo eran los ataques? Al avión que venía a observar el terreno, en primer lugar, le llamaban runrún o abuelo... Detrás de él venían los bombarderos y las escuadrillas. Eibar sufrió varios bombardeos y el fuego de artillería fue prácticamente diario durante los siete meses; los sublevados lanzaban desde la campa de Arrate, desde Soraluze y desde Karakate. Los leales a la República disparaban contra los aviones desde Eibar, con cañones de la fábrica de Soraluze.

¿Cómo se defendían de los ataques de la aviación? En la cumbre del monte Galdaramiño había un puesto de observación aérea con prismáticos y en el campanario de la iglesia de San Andrés también. Cada vez que se avistaba la llegada de aviones, se activaba todo un sistema de sirenas y un coche recorría la ciudad mientras duraba el bombardeo. La gente se guarecía en los 16 refugios que había habilitado el Ayuntamiento.

¿Se puede decir que la villa armera fue más castigada por su historia y su realidad socio-política?El ensañamiento fue grande, porque Eibar era un símbolo. Los franquistas habían transmitido a Hitler y a Mussolinni que aquello era el símbolo de la República y que había que acabar con los vascos separatistas. Se daban esos dos componentes: el abertzalismo y el movimiento de izquierdas.

¿Cómo fue la posguerra en Eibar? Si tenía casi 13.000 habitantes a comienzos de la II República, en 1940 se censaron 12.600 habitantes. Mucha gente había muerto o estaba huida. Otros se encontraron con que sus casas estaban ocupadas por otras personas.

De proclamar la República a estar gobernada por la derecha franquista. El salto tuvo que ser enorme para la sociedad eibarresa. Ideológicamente, Eibar cambió enormemente. Pero un hecho diferencial es que no hubo un ensañamiento en la posguerra. El propio alcalde carlista de Eibar quemó muchos documentos comprometidos para gente de izquierdas. Ese espíritu eibarrés hizo que buena parte de la gente de derechas no se ensañase contra los perdedores.