Adiós, Miguel Mari, adiós

pamplona. Miguel Mari Urrutia Eskudero (Saldias, 1983) disputó ayer en el frontón Labrit de Pamplona su último partido como remontista profesional. A pesar de que solo tiene 28 años (cumple 29 el próximo 31 de mayo) y un envidiable palmarés (en el que destacan los títulos individuales que conquistó en 2008 y 2009), lo deja. Al menos de momento. El zaguero se marcha a vivir a México, el país natal de su esposa, y abandona una modalidad a la que ha dedicado los últimos once años de su vida, los nueve últimos como profesional.

Aunque Urrutia no se ha atrevido a afirmar con rotundidad que esta vaya a ser su retirada definitiva -su empresa, Oriamendi, le ha dejado sus puertas abiertas para un posible regreso en el futuro-, lo cierto es que el partido que disputó ayer tuvo sabor a despedida. Y es que la Fundación Remonte Euskal Jai Berri aprovechó el festival para tributarle un tan emotivo como merecido homenaje.

El partido que acogió ayer el Labrit estaba enmarcado dentro de los actos de la tercera edición del Congreso Navartur 2012, cita que aprovechó la Fundación Remonte Euskal Jai Berri para promocionar la modalidad como alternativa turística a los touroperadores que han acudido estos días al Congreso de Turismo Rural de Navarra. De hecho, la presentación del festival se realizó a primera hora de la mañana en Baluarte, acto al que acudieron tres de los cuatro protagonistas del partido -Endika, Urtasun y el propio Urrutia, ya que Lizaso excusó su ausencia por motivos personales-, así como el consejero de Turismo del Gobierno de Navarra, Juan Luis Sánchez de Muniain; el director de Turismo, Carlos Erce; el presidente del Patronato de la Fundación Remonte Euskal Jai Berri, Iñaki Crespo; el director gerente de la misma, Jaime Aguirre; el presidente de Anapeh, Fermín Fernández; la responsable de comunicación de Reyno Gourmet, Cristina Lecumberri; y el director del congreso, Luis Cortés.

Sin embargo, lo importante llegó por la tarde, con la disputa de un partido en el que Miguel Mari Urrutia, con Endika como delantero, derrotó a Urtasun y Lizaso (40-35). Antes del choque, el zaguero de Saldias recibió obsequios de manos de Miguel Pozueta (director del Instituto Navarro de Deporte y Actividad Física) y Montxo Iriarte (presidente de la Federación Navarra de Pelota). Después le tocó jugar. Lo dejó todo en la cancha para conquistar la que se convirtió en su último victoria. Al menos, de momento.