Contradictorios estados de la Unión Europea: Francamente, no hay quien los entienda. Cada dos por tres se dan golpes de pecho reclamando “políticas más ambiciosas” en materia medioambiental. Ahora, sin embargo, acogotados por las protestas del campo, tienen el cuajo de utilizar la misma expresión pero para reclamar justo lo contrario. Así, el ministro de Agricultura de Bélgica, erigido en portavoz de todos los gobiernos, pidió ayer a la Comisión Europea “medidas más ambiciosas para relajar los requisitos ambientales de la PAC”. O sea, que tanto cantar las mañanas con la transición energética, la emergencia climática o el futuro verde, pero, a la hora de la verdad, resulta que los objetivos impepinables se pueden revisar a la baja. Quizá si desde el principio fueran realistas no estaríamos en esta yenka.