Expresidente de Andalucía y del PSOE pendiente de entrar en prisión tras su condena en firme por el caso de los ERE: Ya escribí aquí que, humanamente, comprendería que se librase de la prisión por motivos de salud. De momento, ha conseguido varias prórrogas en las que ha podido recibir la atención médica que precisaba. Tocaba, pues, que el Tribunal Constitucional tomara la decisión final, y parece que se disponía a ello, cuando alguien ha mandado parar, obviamente, por criterios políticos. Se aplaza la resolución hasta después de las elecciones del 28 de mayo. Y ya digo, todo perfecto. Lo único que espero es que todos los condenados en su situación reciban el mismo trato. Algo me dice, sin embargo, que no es así ni por asomo.