El movimiento táctico-politico de Pablo Iglesias, es, de lejos, la mejor jugada política de los últimos tiempos.Reconocer que en el Gobierno de coalición estaba siendo un obstáculo para seguir trabajando en políticas de progreso, porque ya daba la sensación de que todo se discutía, no en función de políticas más o menos progresistas, sino que era una cuestión personal Sánchez versus Iglesias.Reconocer que la miembro de su partido y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, está más que capacitada para llevar las riendas del país en un futuro no muy lejano significa tres cosas.Que no todos los políticos son iguales.Que siendo un líder indiscutible en tu formación se puede ver que hay a tu lado gente con, incluso en algún sentido, más talento político que el tuyo. Y que en esto Pablo Iglesias es un experto, hay otras formas de desacreditar y desmontar el tinglado de la derecha en lugares como Madrid, donde hay una insumisión generalizada contra todas las leyes, especialmente las que regulan los gravámenes, con el fin de vivir a costa del resto del Estado y encima presumir de que ellos no pagan impuestos.Deja de ser vicepresidente del Gobierno, con todo lo que ello conlleva económicamente, y se lanza a la arena a pelear políticamente con personajes como Isabel Díaz Ayuso, que no deja de ser una marioneta que solo sabe leer el papelito escrito por el asesor de turno y seguir las consignas: ahora le ha tocado libertad o comunismo.Dicen que este paso puede unir más a la derecha. La derecha ya está unida por sus intereses pecuniarios fundamentalmente. Lo que hace falta es unir a la izquierda... A ver si lo logra y al final podemos ver que en Iberia hay algo más que playa, alcohol y toros...De momento.... ¡genial!