Platón fue uno de los más grandes filósofos de la Historia. Sus dos mundos y el mito de la caverna han dado mucho que hablar. Matrix es un ejemplo de ello, una versión moderna del mito de la caverna. El dualismo ha llegado mucho más lejos. Platón hacia una separación de la realidad en dos mundos: el mundo sensible y el mundo de las ideas. En el primero, están las cosas, valores, seres€ imperfectos y sujetos a cambio. En el segundo, en cambio, están las ideas de estos, su esencia. Por ejemplo, en este mundo hay tigres y en el mundo de ideas está la idea de tigre. Platón decía que los valores también tenían su idea correspondiente. La idea de bien es la idea suprema para él. En el mito de la caverna, el filósofo se libra de las ataduras para saber más. De esta manera, conoció de primera mano que le estaban engañando al ver la hoguera y las formas, y, al salir de la caverna, ver el sol y las flores. Al volver de su aventura y al decir a sus compañeros insistentemente que era un engaño, lo acaban matando.Al igual que el filósofo, el trabajador social debe plantearse ir en búsqueda de la idea de solidaridad. Debe buscar fuera de la cultura del descarte y del individualismo vigente hoy en día. Debe saber entregarse plenamente a la otra persona. Debe amar hasta el extremo a la otra persona incluso en los momentos más duros. E, incluso, debe morir por sus ideales.Sin embargo, en esta sociedad no es fácil pensar por si mismo. Bombardeo constante de la misma información, demonización de lo diferente€ son algunos ejemplos de esta lacra que emana de un individualismo vestido y aseado de tolerancia. Hay que volver a recuperar valores como el amor sincero por la vida que te hace entregar a la otra persona.