La paz se aleja de Ucrania: Putin niega un acuerdo tras la reunión con el enviado de Trump y señala a Europa como culpable

El presidente ruso, Vladímir Putin, no logró en su sexta reunión con el enviado especial de la Casa Blanca, Steve Witkoff, acercar posturas sobre el plan de paz para Ucrania presentado por Estados Unidos, lo que descarta un pronto arreglo del conflicto.

"Por el momento no hemos logrado un compromiso, pero varias propuestas estadounidenses son más o menos aceptables. Se pueden discutir. Otras proposiciones que se plantearon no nos convienen", aseguró a la prensa rusa Yuri Ushakov, asesor de política internacional del Kremlin.

Fueron cinco horas de negociaciones en las que ambas partes abordaron el plan original del presidente de EE.UU., Donald Trump, que fue tamizado en las últimas dos semanas por Kiev y los países europeos, y cuatro documentos más que el emisario estadounidense entregó hoy a la parte rusa.

La renuncia de Ucrania a la OTAN, las garantías de seguridad, el repliegue del Donbás y las reparaciones rusas tras la posguerra son algunos de los asuntos que ni los bandos ni los mediadores han podido consensuar.

Ni más lejos ni más cerca

Sea como sea, Ushakov subrayó que las posiciones de ambas partes "no están más lejos, eso seguro", que antes de la reunión.

"La reunión fue muy útil, constructiva y sustancial, y se prolongó no durante cinco minutos, sino durante cinco horas (...) Pero aún queda mucho trabajo por hacer tanto en Washington como en Moscú", destacó.

En particular, en el Kremlin se abordó "el problema territorial", sin el que —remarcó— Rusia no ve una solución a la crisis.

El líder ruso criticó algunos puntos del plan estadounidense, pero apoyó la mayoría de ellos, al tiempo que denunció la actitud "destructiva" de los países europeos.

"En algunos (puntos) podíamos estar de acuerdo y el presidente se lo dijo a sus interlocutores. Otros suscitaron nuestras críticas. Y el presidente no ocultó su opinión crítica e incluso negativa respecto a varias propuestas", señaló.

En cuanto a una posible reunión entre Putin y Trump tras la cancelación de la cumbre de Budapest, admitió que dependerá de los progresos que se logren durante el proceso de paz.

El equipo de la paz de Gaza

Witkoff, criticado en el pasado por presentarse en el Kremlin sin intérprete, llegó esta vez acompañado por una traductora y por Jared Kushner, asesor y yerno del presidente de EE.UU.

Les guió durante la visita el emisario económico del Kremlin, Kiril Dmítriev, considerado por la prensa uno de los autores del plan de 28 puntos, calificado como prorruso por Kiev y la mayoría de países occidentales.

Dmítriev destacó en X que era un "día importante para la paz" porque a Moscú llegó "el equipo que hizo realidad el acuerdo de paz del presidente Donald Trump en Gaza".

La reunión estuvo marcada por el escándalo de la filtración de las conversaciones telefónicas entre Witkoff y Ushakov, y también entre este último y Dmítriev.

Según la prensa, Witkoff recomendó que Putin llamara a Trump antes de la reunión del segundo con el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, en la Casa Blanca, donde solicitó misiles Tomahawk.

Witkoff llegó a Moscú tras consultas el domingo con representantes ucranianos en Miami y una videoconferencia con Zelenski y el presidente francés, Emmanuel Macron.

Europa es culpable

Antes de acudir a la reunión, Putin habló extensamente con la prensa local y acusó a Europa de "bloquear todo el proceso de paz".

"Ellos mismos se abstienen de las negociaciones de paz y, al mismo tiempo, ponen trabas al presidente Trump. No tienen agenda de paz. Están a favor de la guerra", afirmó tras intervenir en un foro del banco VTB.

Denunció que Francia, Alemania y el Reino Unido incluyen en el plan de paz exigencias "absolutamente inadmisibles" para Rusia.

"Ellos lo entienden y así culpan a Rusia de rechazar ese proceso de paz. Ese es su objetivo. Lo vemos claramente", afirmó.

Putin prepara al ejército para el 'general invierno'

Como demostración de que está dispuesto a seguir combatiendo en 2026 si no se satisfacen sus demandas, Putin pidió al Ministerio de Defensa preparar al ejército para el invierno.

"El Ministerio de Defensa y el Estado Mayor deben pensar en el avituallamiento de las tropas para la llegada del invierno. Los hombres deben recibir todo lo necesario", dijo. Putin también anunció la toma del bastión de Pokrovsk —la mayor victoria rusa desde la conquista del puerto de Mariúpol, en la región de Donetsk—, algo que Kiev negó categóricamente. "Es una buena cabeza de puente para lograr todos los objetivos marcados al comienzo de la operación militar especial", pronosticó.