La fundación sueca Right Livelihood Award ha distinguido este jueves con el denominado Nobel alternativo la acción civil contra la ocupación en Palestina del grupo Youth Against Settlements (YAS) y a varios movimientos por la justicia ambiental.

Además de a YAS, este galardón ha reconocido también la labor de la activista indígena filipina Joan Carling, la mozambiqueña Anabela Lemos y el grupo de investigación británico Forensic Architecture.

El jurado ha destacado "la resistencia rotunda y no violenta a la ocupación ilegal israelí", impulsando la acción civil por "medios pacíficos", de YAS y de Issa Amro (Hebrón, 1980), fundador de la organización en 2007.

Resistencia pacífica

YAS ha jugado un rol "fundamental" en documentar violaciones de derechos humanos, organizar protestas y apoyar a las comunidades locales de Hebrón, en Cisjordania, donde tiene su base, además de servir de "inspiración" para la resistencia no violenta en otras ciudades palestinas.

El fallo resalta que el grupo ha estado "bajo presión constante de los colonos, el Ejército israelí y también la Autoridad Palestina", y que Amro ha sido detenido, torturado, atacado, expulsado de su casa y sometido a "acoso judicial", pero sin abandonar su "compromiso inquebrantable" por la lucha pacífica.

A la filipina Joan Carling (Baguió, 1963) se la distingue "por amplificar las voces indígenas ante el colapso ecológico mundial y por su liderazgo en la defensa de los pueblos, los territorios y la cultura".

Carling lleva más de treinta años defendiendo los derechos de los pueblos indígenas en Filipinas, una lucha que ha conseguido llevar al escenario regional y global, lo que le ha costado también detenciones y amenazas de muerte.

Su labor ha frenado proyectos de desarrollo no sostenible en su país, asegurado financiación y apoyo internacional para organizaciones autóctonas de toda Asia y ayudado a dar forma a políticas de la ONU sobre los derechos de las mujeres indígenas.

Otros premiados

El Nobel alternativo reconoce además a la mozambiqueña Anabela Lemos (Maputo, 1953) y la organización Justiça Ambiental!, creada en 2004, "por fortalecer a las comunidades para hacer valer su derecho a decir que no a los megaproyectos de explotación y exigir justicia ambiental".

Esta organización se ha significado contra varios proyectos como el de la francesa TotalEnergies para extraer gas en Cabo Delgado y ha creado alianzas con la sociedad civil en una veintena de países para retrasar con éxito su puesta en marcha.

"Durante más de veinte años, Lemos y JA! han trabajado de forma valiente con las comunidades afectadas para combatir proyectos gubernamentales y empresariales que provocan desplazamientos de población, dañan modos de vida e intensifican el cambio climático", consta en la motivación del premio.

Defensa del medioambiente

En el caso de Forensic Architecture, el fallo reconoce su compromiso "por liderar el camino hacia métodos forenses digitales que garantizan la justicia y la rendición de cuentas para víctimas y supervivientes de violaciones de derechos humanos y ambientales".

Este grupo creado en 2010 por el arquitecto británico-israelí Eyal Weizman ha sido pionero en descubrir y documentar violaciones medioambientales y de los derechos humanos usando tecnología avanzada en testimonios y relatos históricos para crear reconstrucciones visuales y espaciales que han sido empleadas como evidencia en casos jurídicos emblemáticos de todo el mundo.

Así, ha llevado a cabo más de cien investigaciones en nombre de las comunidades afectadas, desvelando verdades sobre acontecimientos históricos, como el genocidio colonial de Alemania en Namibia, y actuales, como el incendio de la Torre Grenfell de Londres en 2017.

"Las personas laureadas de 2024 demuestran el poder de la resistencia no violenta y la búsqueda de la verdad, ubicando la toma de decisiones en manos de las comunidades locales", señaló Ole von Uexkull, director ejecutivo de Right Livelihood.

El Premio al Correcto Modo de Vida (Right Livelihood Award), como realmente se llama este galardón que distingue la labor social, ha reconocido a cerca de dos centenares de personas y organizaciones desde que fue instituido en 1980 por el escritor y eurodiputado sueco-alemán Jakob von Uexküll.