El Ejército israelí desmanteló ayer el cuartel general de la Brigada de Jan Yunis de Hamás, donde se encontraba un centro de entrenamiento y las oficinas de su comandante Mohamed Sinwar, hermano de Yahya Sinwar, líder del grupo islamista dentro de la Franja de Gaza, según fuentes militares.

El complejo, conocido como Al Qadsia, era la base principal de esa brigada, una de las más poderosas del brazo armado de Hamás, y allí se planificó y se entrenó a miembros del grupo para los ataques del 7 de octubre en Israel, informó ayer el Ejército.

Desde principios de diciembre, las tropas israelíes centran su ofensiva dentro del enclave en Jan Yunis, principal ciudad de la Franja y bastión de Hamás en el sur, y donde creen que se esconde Yahya Sinwar. “Al entrar en la zona, las fuerzas identificaron que el complejo tenía trampas explosivas de los terroristas de Hamás, incluso camufladas dentro de los muros, que fueron neutralizadas por fuerzas de ingeniería”, indicó un comunicado castrense.

El Ejército explicó que milicianos de Hamás que se encontraban atrincherados cerca del lugar abrieron fuego contra los soldados, y fueron “neutralizados por francotiradores, tanques y la fuerza aérea de Israel”. En el complejo hallaron “amplias zonas de entrenamiento”, donde encontraron modelos que simulaban las entradas a kibutz israelíes, bases militares y vehículos blindados de las Fuerzas de Defensa de Israel.

El 7 de octubre, más de 3.000 milicianos de Hamás protagonizaron una incursión armada contra decenas de comunidades del sur de Israel, la mayoría kibutz, matando a más de 1.200 personas y secuestrando a más de 250.

La guerra declarada por Israel a Hamás ese mismo día se ha cobrado la vida, dentro de la Franja, de más de 27.300 gazatíes y herido a más de 66.600, según fuentes médicas bajo control del grupo islamista.

“Los soldados también irrumpieron en la sala de guerra central de la Brigada Jan Yunis y en las oficinas de sus oficiales superiores. La base contenía instalaciones de almacenamiento de cohetes y bocas de túneles que conducían a rutas subterráneas utilizadas por la organización terrorista Hamás”, subrayó el Ejército.

El Ejército dijo haber encontrado una fábrica de armas y un amplio arsenal que incluye misiles antitanque, ametralladoras, RPG, explosivos, granadas y municiones.

Netanyahu enfría el acuerdo

Mientras tanto, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, aseguró ayer que su gobierno “no aceptará cualquier acuerdo, ni a cualquier precio” sobre una tregua en la Franja de Gaza, cuando se espera que en las próximas horas las partes respondan a una propuesta de acuerdo mediada por Catar y Egipto. “Muchas cosas se dicen en los medios como si estuviéramos de acuerdo con ellas, como lo relacionado con la liberación de terroristas, simplemente no las aceptaremos”, reiteró el mandatario al comienzo de la reunión del gabinete de gobierno, en Tel Aviv.

Las últimas informaciones de las negociaciones en marcha, según fuentes libanesas, hablaban de la liberación de los 136 rehenes que mantiene Hamás en cautividad, algunos ya muertos, durante un plazo de 142 días a cambio de la liberación de más de 100 presos palestinos por rehén.

Sin embargo, el grupo islamista exige como punto de partida el compromiso israelí de que accedan a un cese el fuego permanente que ponga fin a la guerra, algo que Israel no está dispuesto a aceptar.

Los mediadores entregaron el pasado jueves a Hamás un borrador de acuerdo –que ya contaba con el visto bueno de EEUU e Israel– que el grupo islamista aceptó de forma preliminar, aunque con asuntos aún que cerrar. Según Hamás, el grupo islamista ha presentado una propuesta más definida y espera una respuesta de Israel.