El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, anunció ayer que ha convocado a representantes de Turquía, Finlandia y Suecia a una reunión en Bruselas el próximo 7 de julio para intentar desbloquear el acceso de Estocolmo a la Alianza, que todavía vetan Ankara y Budapest.

“Estamos trabajando para ultimar la adhesión de Suecia. Por eso he convocado otra reunión de altos funcionarios de Turquía, Suecia y Finlandia para el próximo jueves 7 de julio”, indicó Stoltenberg durante una rueda de prensa junto a la primera ministra estonia, Kaja Kallas, tras reunirse con ella. El secretario general aliado dijo que “ha llegado el momento de dar la bienvenida a Suecia como miembro de pleno derecho de la OTAN”.

Stoltenberg habló por teléfono hace tres días con el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, quien insistió en que Suecia debe impedir las protestas de simpatizantes del proscrito Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) en su territorio para recibir el visto bueno de Ankara a su ingreso en la OTAN.

El PKK es considerado una organización terrorista por Turquía, Suecia y la Unión Europea. Ankara también considera que las milicias kurdosirias YPG son una mera filial del PKK, mientras que la UE no las considera terroristas. Turquía es, junto con Hungría, el último país que frena la adhesión de Suecia a la Alianza.