Tanto la OTAN como el Gobierno de Estados Unidos han señalado esta semana que aumentarán su presencia en el Ártico, como consecuencia del aumento de la actividad militar de Rusia en el norte de sus territorios.

El secretario de la OTAN, Jens Stoltenberg, ha declarado en una entrevista para el periódico alemán 'Welt am Sonntag' que la Alianza Atlántica "debe aumentar su presencia en el Ártico, debido a que Rusia está expandiendo su influencia en dicha zona.

"Ya estamos invirtiendo en exploradores marinos para obtener una imagen clara de lo que sucede en el extremo norte, pero continuaremos intensificando nuestros esfuerzos", ha declarado Stoltenberg.

El también ex primer ministro noruego ha hecho hincapié en las preocupaciones que genera que tanto Rusia como China estén mostrando interés en la región, rica en recursos.

"Moscú está en proceso de reabrir bases de la era soviética y desplegar y probar allí nuevas armadas de última generación, como misiles hipersónicos", ha explicado el jefe de la OTAN, después de haber viajado a la parte canadiense del Ártico junto al primer ministro de Canadá, Justin Trudeau.

Así, ha señalado que China cada vez está más interesada en la región por la "gran importancia estratégica", sobre todo, a medida que el hielo se derrite, porque se abren nuevas rutas comerciales, para poder construir una "ruta de la seda polar".

"Es la conexión crucial entre América del Norte y Europa. El Ártico es también la distancia más corta entre América del Norte y Rusia", ha explicado.

El viernes, tras la visita de Stoltenberg a los territorios canadienses del Ártico, el secretario general de la OTAN advirtió de que el aumento de la presencia rusa en la región constituye "un desafío estratégico para toda la Alianza".

"Rusia ha establecido un nuevo Comando Ártico. Ha abierto cientos de nuevos y antiguos sitios militares del Ártico de la era soviética, incluidos aeródromos y puertos de aguas profundas. Rusia también está utilizando la región como banco de pruebas para muchos de sus nuevos sistemas de armas", aseguró Stoltenberg.

Por su parte, Trudeau ha explicado que el cambio de actitud de su país en cuanto a la participación de la OTAN en el Ártico se debe a la deriva de la situación geopolítica en los últimos meses. Entender que Rusia es una preocupación cada vez mayor para todos nosotros hace que sea oportuno que compartamos con el secretario general y con la OTAN todo lo que Canadá está haciendo a través de NORAD", ha afirmado.   

EEUU PLANTEA UN EMBAJADOR ESPECIAL PARA EL ÁRTICO

El Departamento de Estado de Estados Unidos anunció el viernes que nombraría, en caso de que el Senado apruebe la medida, un embajador especial para la región del Ártico, por primera vez.

El objetivo de esta figura sería "promover los intereses estadounidenses y la cooperación con los aliados y socios en el Ártico", según ha explicado el portavoz adjunto de la Oficina de Asuntos Públicos Globales, Vedant Patel.

"Se relacionará con sus homólogos en las naciones del Ártico y fuera del Ártico, así como con los grupos indígenas, y trabajará en estrecha colaboración con las partes interesadas nacionales, incluidos los gobiernos estatales, locales y tribales; empresas, instituciones académicas, organizaciones sin fines de lucro, otras agencias del gobierno federal y el Congreso", ha relatado Patel.

Estados Unidos ha insistido en que la región ha de ser "pacífica, estable, próspera y cooperativa", tras considerar que tiene una "importancia estratégica crítica para el país norteamericano".