La votación de los afiliados al Partido Conservador británico para elegir al nuevo líder de la formación, que sustituirá a Boris Johnson como primer ministro, ha sido retrasada tras identificarse un riesgo de pirateo informático en la plataforma electoral, informó ayer el diario The Telegraph.

Los afiliados –unos 160.000– iban a recibir esta semana por correo postal las papeletas de votación, pero el proceso ha sufrido un retraso después de una alerta recibida por el Centro Nacional se Seguridad Cibernética (NCSC), agregó el periódico. El NCSC es parte del centro de escuchas británico GCHQ. Se espera que los afiliados puedan empezar a votar a partir del próximo día 11, de cara a conocerse al ganador del liderazgo –Krishi Sunak (exministro de Economía) o Liz Truss (titular de Asuntos Exteriores)– el próximo 5 de septiembre.

De acuerdo con el plan de votación, los afiliados recibirían una papeleta por correo con un código específico, que pueden después utilizarlo para votar por correo postal o en línea. Según The Daily Telegraph, había temores de que “actores infames” pudieran cambiar los votos de una gran cantidad de afiliados al partido, con consecuencias para este proceso democrático.

“Defender la democracia del Reino Unido y el proceso electoral es una prioridad para la NCSC, y trabajamos estrechamente con todos los partidos políticos parlamentarios, las autoridades locales y los diputados para facilitar directrices y apoyo en materia de seguridad cibernética”, indicó a The Daily Telegraph un portavoz del NCSC.