Los disidentes del Ira se unen para dinamitar el proceso de paz
Un informe de la Comisión Independiente de Control eleva el índice de amenaza
dublín. Los grupos disidentes del inactivo Ejército Republicano Irlandés (IRA) están aunando esfuerzos para dañar el proceso de paz y elevar el nivel de la amenaza paramilitar en Irlanda del Norte, que se encuentra en el punto de mayor desarrollo en seis años.
Esa es la principal conclusión del último informe divulgado ayer por la Comisión Independiente de Control (IMC), que supervisa la actividad terrorista de los grupos armados que operan en la República de Irlanda e Irlanda del Norte.
Según su análisis, los disidentes del IRA Auténtico y del de Continuidad, responsables el pasado marzo del asesinato de dos soldados y un agente de policía en la provincia británica, respectivamente, trabajan ahora juntos para intensificar su campaña de violencia.
"El nivel general de actividad disidente fue significativamente más alto que el registrado desde finales de 2003", dice el informe, que analizó los datos de las fuerzas de seguridad la situación de los paramilitares entre marzo y agosto. "Durante este periodo -indica el texto- los disidentes republicanos se mostraron violentos y demostraron su predisposición a matar cuando se presentó la oportunidad".
El pasado marzo, el IRA Auténtico asesinó en la base militar de Massereene, al norte de Belfast, a los soldados Patrick Azimkar y Mark Quinsey, de 21 y 23 años, respectivamente, y dos días después el IRA de Continuidad abatía a tiros en la localidad fronteriza de Craigavon al policía católico Stephen Carroll, de 48 años.
"Estos asesinatos fueron los incidentes más serios, pero ha habido otros despiadados", precisa la IMC, que cita la campaña de ataques con bomba perpetrados por ambos grupos disidentes.
Más en Mundo
-
Donald Trump sufre "insuficiencia venosa crónica"
-
Trump demandará al 'Wall Street Journal' por la difusión de una carta a Epstein
-
Israel bombardea en Gaza la iglesia a la que cada día llamaba el Papa Francisco
-
Reino Unido rebaja a los 16 años la edad mínima para votar en las próximas elecciones generales