En Change.org una recogida de firmas denuncia que la Uned ha prescindido de una profesora “por tener más de 70 años. ¡Basta de discriminación!”. El alumno de 80 años que promueve la iniciativa –una manera muy contemporánea de recoger firmas sin tenderetes– ha movilizado más de 50.000 rúbricas. Estas mismas semanas más de 500 personas han firmado para pedir que el Zinemaldia no proyecte una película sobre un exdirigente de ETA. Entre lo que ha trascendido que dice en la cinta, aborda la hasta ahora desconocida participación en el asesinato del alcalde de Galdakao en 1976, crimen amnistiado en 1977 en un momento político en el que la palabra amnistía monopoliza los caminos a la Moncloa. En medio de todo hay un Festival que trabaja a contrarreloj en su 71ª edición y que no ha debido de recibir el documento con las firmas. El “no hemos recibido nada” suele ser una gran coartada de la comunicación corporativa moderna para callar y escabullirse, pero la dirección del Zinemaldia, cuya trayectoria le avala cuando ha entrado al fondo (y con acierto) en la polémica que le viene cada año, ha mirado de frente al asunto e invitado a los firmantes sin lograr respuesta a ver la película. La que no han visto para firmar una petición que, a diferencia del alumno de la Uned, ni han entregado.