zumarraga - La Diputación tiene intención de implantar peajes en la A-636 (Beasain-Bergara) y un grupo de vecinos de Urretxu y Zumarraga ha creado una plataforma en contra de este medida. El jueves llevaron a cabo una concentración en Zumarraga, a la que acudieron cerca de 300 personas, y participaron en el Pleno. Los representantes municipales, a petición de la plataforma, dieron su opinión sobre los peajes.

El portavoz de la plataforma en el pleno fue Edu Reguero. Calificó de "sorprendente" que hasta entonces ningún partido político se hubiese posicionado ni a favor ni en contra de los peajes. Trató de desmontar los argumentos de la diputada Aintzane Oiarbide. "Se agarra a la normativa europea, pero esta no menciona a los automóviles. Atañe a los vehículos de más de 3,5 toneladas. Oiarbide dice también que hay que pagar el coste y el mantenimiento de esta carretera. ¿Y qué pasa con la GI-20, la variante de Donostia, la N-I...?".

Recordó que en la A-636 el coste total por trayecto será de 3 euros para los vehículos ligeros y 6 para los camiones. "El tope máximo para los vehículos ligeros será de 32 euros al mes (384 euros anuales). A nada que se use la carretera, el máximo y el mínimo serán parejos. Y no habrá descuentos para los camiones".

Carretera vieja Mostró su temor a que la implantación de los peajes provoque que los vecinos utilicen la carretera vieja, con lo que ello conllevaría: "más tráfico en la avenida Euskal Herria de Zumarraga, mayor siniestralidad para conductores y ciclistas, más tiempo para llegar al lugar de destino...".

Añadió que la normativa permite hacer financiación cruzada: utilizar lo recaudado en la A-636 para pagar el TAV, el metro de Donostia u otras carreteras. Por todo ello, pidió a los concejales que se posicionasen y a la Diputación que se eche atrás.

La primera concejal en tomar la palabra fue Inés Benítez, de Elkarrekin Zumarraga. Reconoció que todavía no se habían posicionado. "Entendemos que la A-636 no soporta tráfico de paso y que si no tuviésemos esta carretera solo nos quedaría el puerto de Deskarga. Necesitamos esta carretera y si se implantase el peaje habría que mejorar el transporte público. Vamos a seguir recabando información y si queréis hablar, estamos a abiertos a reunirnos con vosotros".

Josu Idigoras, del PNV, recordó que la Diputación no recibe ayuda de otras instituciones para construir y mantener las carreteras. "Estamos en un lugar estratégico de paso a Europa, se ha finalizado la rotonda de Gipuzkoa y el coste del mantenimiento de las carreteras es cada vez mayor. La Diputación destina la mitad de su presupuesto a políticas sociales y así es difícil pagar el mantenimiento de las infraestructuras viarias. Son las Juntas Generales las que han aprobado los peajes, con el voto a favor de PNV y PSE-EE, la abstención de EH Bildu y PP y el voto en contra de Podemos".

Añadió que el PNV de Zumarraga se ha reunido con Oiarbide para transmitirle su preocupación. "Nos dijo que habrá un sistema de descuentos potente y que el dinero que se recaude en la A-636 se utilizará íntegramente para el mantenimiento de esta carretera".

Recordó que la estrategia "el que utiliza, paga" ya venía recogida en la ponencia realizada cuando Larraitz Ugarte (EH Bildu) era diputada.

Ainhoa Osinalde, de EH Bildu, mostró su satisfacción por que un grupo de vecinos se haya constituido en una plataforma. "Nosotros también estamos preocupados y la situación exige un análisis profundo. Hemos llegado a esta situación por la mala gestión del PNV: por su apuesta por las grandes infraestructuras y la deuda de Bidegi. El peaje de la A-636 es un parche que perjudica a unos ciudadanos en concreto. Hace falta dinero para mantener las carreteras y la solución debe ser integral. Esto, en cambio, es discriminatorio. Estamos de acuerdo en que el que utiliza las carreteras debe pagar por ello, pero deben pagarlo todos mediante una viñeta social. Y hay que mejorar el transporte público".

El alcalde, Mikel Serrano (PSE-EE), también mostró su preocupación. "Yo también he estado con la diputada y le he trasladado la preocupación de la ciudadanía. Esta medida no se toma de ayer a hoy. Detrás de la pancarta todo es factible, pero luego las cosas cambian. Como alcalde, en la legislatura 2011-2015 me tocó pedir que se acabara la obra. Por aquel entonces, EH Bildu no acometió la obra para no hacer lo que hasta entonces había hecho el PNV".

Recordó que la nueva carretera de Deskarga ha traído consigo muchas ventajas. "Ahora tardamos menos en ir a Bergara, Arrasate o Bilbao y eso ha salido de los presupuestos. Y el dinero que se cobre en los peajes de la A-636 no va a ser para el metro de Donostia. Va a ser para mantener esa carretera y mejorar el transporte público".

Reconoció que a él también le molesta tener que pagar. "Pero hay que ver dónde estamos ahora y dónde estábamos hace quince años. A lo bueno nos acostumbramos enseguida. Los políticos estamos para tomar decisiones, asesorados por los técnicos. Es una decisión complicada, pero la calidad de vida ha mejorado. Me comprometo a trabajar para tomar la mejor decisión posible y hacer que el perjuicio sea el menor posible, pero es complicado porque en las Juntas Generales una amplia mayoría se ha posicionado a favor de que el que utilice pague".