- Con todas las medidas de seguridad necesarias, ayer por la mañana se celebró la venta de alimentos por parte de los baserritarras en la plaza de Ordizia. Tal y como destacaron desde el Ayuntamiento, la conocida feria de los miércoles ha sido cancelada pero quieren dar una oportunidad a los productores para que puedan venden sus productos.

Así, se organizaron nueve puestos manteniendo las distancias entre ellos y el mismo alcalde de la localidad, Adur Ezenarro, que también es arquitecto, diseñó la distribución de la plaza. Ayudados por los miembros de Babes Zibila, acordonaron la zona y pusieron cintas para que las y los compradores mantuviesen la distancia de seguridad. Además, la entrada y la salida también fueron vigiladas.

La iniciativa ha provocado el agradecimiento de las y los vendedores. Iñaki Intxausti, de Zerain, explicaba que no es tiempo de parar: "Al final muchos de mis compradores son de edad avanzada, y en esos casos sí que no están acudiendo y respetan que se tienen que quedar en casa. De todas maneras, para nosotros es muy importante poder vender aquí y valoramos el apoyo".

De la misma manera, Patxi Izagirre comentó que la organización estaba "muy bien" y que estaban "muy contentos". "Si no, nuestro producto, que es fresco, se pierde. Somos el último eslabón y esto supone mucho".

La habitual feria de los miércoles acoge 65 puestos. La clienta ordiziarra Edurne Huesa mostraba su satisfacción ante este formato provisional: "Estoy inmensamente feliz de poder comprar productos locales aquí, a las y los baserritarras".