En Goierri hay tal afición al deporte, que hasta entre los alcaldes se pueden encontrar grandes deportistas. Al de Beasain, Koldo Agirre, le gusta correr y en la última Behobia-Donostia se clasificó en el puesto 183, con un tiempo de 1.13.59. El de Lazkao, por su parte, es un gran palista. Fue campeón de Gipuzkoa y de Euskadi, ganó el torneo Gravni y mañana se enfrentará al campeón del mundo Rubén Ayarra.

A Andonegi siempre le ha gustado el deporte. Fue baloncestista antes que palista y también llegó a jugar a rugby y a pelota a mano. “A baloncesto jugué en el equipo de Lazkao. Era pívot. Tenía buen salto y era bueno en el juego interior. Cogía bastantes rebotes y anotaba bastantes puntos en segundas jugadas. No tenía ni buen tiro ni habilidad con el balón”, reconoce.

Con unos 15 años también probó el rugby, en el equipo de Ordizia. “Solo aguanté media temporada. Es un deporte muy duro y hay que tener el cuerpo muy a punto para poder practicarlo”, comenta.

El deporte que mejor se le ha dado es la pelota. Estaba predestinado a ello, pues su padre fue también campeón de Gipuzkoa de pala. “Toda la vida he jugado a pala con mi padre, pero de niño probé también la pelota a mano. Jugaba de zaguero”. Llegó a ganar un torneo con su vecino Josu Sarriegi, el que fuera futbolista del Alavés, Athletic y Olympiacos.

Posteriormente, ya con la pala en la mano, se ha calado infinidad de txapelas. “He tenido bastante suerte. He tenido la oportunidad de viajar con la selección de Euskadi y gané el torneo Gravni (participan los mejores pelotaris aficionados de Gipuzkoa, La Rioja, Araba, Bizkaia, Nafarroa e Iparralde). Tuve un gran compañero: Andoni Beraza”, dice con modestia.

Además, ha conocido mundo de la mano de la selección de Euskadi. Ha estado en Acapulco, San Francisco y Venezuela. “Gracias a la pala, he vivido grandes experiencias, he podido participar en torneos de alto nivel y he conocido a muchos pelotaris. Me he enfrentado a algunos que posteriormente han sido profesionales”.

Han pasado ya algunos años desde que dejó el deporte de alto nivel, pero sus amigos de Olaberria han organizado un torneo de paleta de categoría Élite en el que participarán dos campeones del mundo y no ha querido perdérselo. “Hace algunos años cambié de trabajo y tuve que dejar de dedicar tanto tiempo a la pelota. Y estos últimos años han tenido prioridad la familia y las labores de la Alcaldía, pero no podía negarme a jugar en Olaberria. Es una gran oportunidad, pues podríamos enfrentarnos a dos campeones del mundo”.

Estos dos campeones son el navarro Rubén Ayarra y el argentino afincado en Barcelona Emiliano Skufca. Andonegi tendrá como delantero al olaberriarra Garikoitz Arrieta. “Me arreglo muy bien con él. El último torneo que gané, el campeonato de Gipuzkoa de paleta, lo gané con él”.

El torneo arrancará mañana. A partir de las 11.00 horas, se jugarán los cuartos de final. El donostiarra David Arozena y el oriotarra Tibur Etxeberria se enfrentarán a la pareja formada por el bilbaino Alain Vega y el hendaiarra Gabi Andueza. Después, Andonegi y Arrieta jugarán contra los pamploneses Rubén Ayarra e Iñigo Anso.

Los ganadores se verán las caras en la semifinal, que se disputará el domingo 30 de noviembre. En la final, el 7 de diciembre, les estarán esperando el vitoriano Eneko Martínez y el mencionado Skufca.

Andonegi ya se ha enfrentado anteriormente al argentino. “Hace dos años me llamaron para participar en un torneo de categoría Élite y me tocó perder contra él. Contra Ayarra no he jugado nunca. Si ellos tienen un mal día y nosotros uno bueno, podríamos ganar”.

El lazkaotarra anima a la gente a acudir a ver los partidos. “En esta zona la pala no es un deporte muy popular, pero se trata de una modalidad en la que se juega a gran velocidad y resulta muy espectacular”.

Válvula de escape A él le sirve como válvula de escape. “Dejé de competir cuando empecé a trabajar de tarde, pero nunca he dejado de jugar. Me sirve para soltar la tensión acumulada, estar con los amigos, sentirme bien, hacer ejercicio, cansarme de un modo diferente al habitual...”.

Al igual que muchos otros goierritarras, juega con el club Oiangu de Ordizia. En sus inicios fue delantero y ahora juega de zaguero. “Soy un zurdo bastante cerrado”, comenta. Su jugador favorito es Tibur Etxeberria, que mañana disputará el primer encuentro de cuartos de final. “Es muy buena persona y muy competitivo. Siempre acierta a poner la pelota donde debe, cubre mucho, ayuda a su pareja, juega muy concentrado... Ha marcado una época y es de agradecer que en su último año en activo haya accedido a venir a Olaberria. En cuanto a Skufca, es un fuera de serie. Es amigo del profesional Fusto. Tienen posturas y golpeos distintos a los nuestros: de la escuela argentina”.

Para finalizar, una pregunta obligada: ¿Qué es más duro, un Pleno o un partido de pelota? “Tanto en el Ayuntamiento como en el frontón, se aprende mucho. Y en los dos sitios se puede disfrutar. Muchas veces las cosas no salen como uno quiere, pero hay que seguir luchando”.