La reforma de la acera oeste, donde se ubican los números pares de la avenida de Sancho el Sabio, suprimirá una de las hileras de árboles de esta calle, en concreto, la situada en el interior de la calle, que cuenta con ejemplares más pequeños. Los de mayor porte, ubicados junto a la carretera, permanecerán y quedarán instalados en una franja de césped que separará la acera de la carretera.

En la actualidad, la línea de árboles que será eliminada pasa por la mitad de la zona peatonal, que tiene una parte pavimentada con la clásica acera blanca donostiarra y la otra, con losetas de piedrillas y otros modelos variados, con abundantes petachos.

La Junta de Gobierno de Donostia aprobó este martes el proyecto de urbanización de esta acera de Amara, en una vía que ha servido durante años como entrada y salida de la ciudad. El coste del proyecto supera el millón de euros. En concreto, son 1.042.966 euros.

Una vez que salga a concurso y se encargue la obra, esta parte de la calle se transformará en un espacio “libre de obstáculos y bien iluminado junto a las viviendas y comercios”, según señaló este martes el alcalde, Eneko Goia tras la reunión en la que recibió luz verde el proyecto para reformar esta parte de Sancho el Sabio.

La actuación, señaló, será más sencilla que la ejecutado en los números impares, donde existen garajes y locales de las comunidades bajo la acera, lo que complicó los trabajos.

En las aceras pares de Sancho el Sabio surgirá una franja ancha de seis metros libres de obstáculos y se reordenará el mobiliario urbano.

También se creará una zona verde, donde están los árboles de tamaño grande en la actualidad, junto a la calzada. En algunos puntos, la franja será totalmente verde mientras que en otros tendrá espacios de paso para las marquesinas de autobuses, pasos de peatones y zonas de aparcamiento de bicicletas.

Los bancos y otros elementos del mobiliario urbano se colocarán pegados a la franja verde, mirando hacia los edificios.