Donostia estrenará este viernes el Mercado de Navidad de este año, adaptado a las circunstancias y con un “estricto” protocolo para garantizar la seguridad sanitaria frente al coronavirus: habrá un control del aforo, que no podrá superar las 600 personas, un itinerario definido con sentido único de circulación y se prohíbe consumir bebidas ni comida.

El mercado estará formado por 34 casetas, menos que otros años, con una distancia de al menos 1,5 metros entre una y otra. 27 de ellas estarán en el paseo de Francia y otras siete en la plaza Ramón Labaien, junto al puente de Santa Catalina. En este caso, el aforo máximo será de 43 personas. Además, se ha dispuesto una zona cubierta de 250 metros cuadrados con capacidad para 50 personas como máximo junto al Urumea.

Para controlar el aforo habrá contadores inteligentes de personas y una pantalla en la entrada (también se puede consultar online a tiempo real) para conocer el nivel ocupación, con un sistema de colores similar al del semáforo (verde, naranja y rojo). También habrá carteles que recuerden a los asistentes que no deben juntarse más de seis personas, así como dispensadores de hidrogel en varios puntos del mercado. Además, se fomentará el pago con tarjeta y habrá una versión online del mercado en la dirección www.donostiagabonetakoazoka.eus para poder realizar las compras a partir de la próxima semana.

El acceso al mercado se hará desde la zona del puente de María Cristina y la estación de autobuses y de Renfe y se podrá visitar caminando hacia el puente de Santa Catalina. Para circular en sentido contrario se deberá pasar por detrás de las casetas para evitar aglomeraciones.

Los puestos estarán abiertos todos los días hasta el 5 de enero de 11.30 a 14.30 horas y de 16.30 a 20.00 horas, aunque los comerciantes también tendrán la opción de abrir media hora antes y de seguir trabajando hasta las 21.00 horas.

La concejala de Impulso Económico, Marisol Garmendia, ha explicado que el mercado es importante para ayudar al comercio local en estas fechas. Ha hecho también una llamada a la responsabilidad de los visitantes “para que todo discurra con normalidad”.

Además del Mercado de Navidad junto al río, también se abrirá en los próximos días la tradicional feria de artesanía de la calle Urdaneta, junto al Koldo Mitxelena. También en este caso, la feria se ha tenido que adaptar a las circunstancias sanitarias y tendrá un protocolo de seguridad para reducir el riesgo de contagio entre sus asistentes.

Bola de Navidad

Además, este viernes se encenderá la bola de Navidad colocada en la plaza de la Constitución que se sumará a la iluminación navideña de la ciudad. En este caso, la bola, al igual que la decoración desplegada por los comercios y escaparates de la zona, intentará reforzar el atractivo de la Parte Vieja estas fiestas, según ha explicado Garmendia. Precisamente, hace algunos días los comerciantes de la zona antigua de la ciudad salieron a la calle para pedir ayuda y denunciaron que, con los bares cerrados y sin visitantes, su actividad se había reducido gravemente