- Los agentes de Movilidad han intensificado su presencia en el cruce entre Urbieta y San Martin, que está cerrado para todos los vehículos excepto autobuses, taxis y motos. Aunque el tramo de San Martin situado junto al Buen Pastor está cerrado por la obra del Topo, cada vez más conductores optan por saltarse las señales para no tener que seguir el itinerario aconsejado por el Ayuntamiento para llegar a Gros y su entorno (Urbieta, calle Parque y paseo de los Fueros).

La concejala de Movilidad, Pilar Arana, reconoció a este diario que el Ayuntamiento es consciente de que muchos coches se saltan las prohibiciones pero añadió que la institución no siempre puede destinar un agente de Movilidad a este punto. Asimismo, recalcó que saltarse las señales horizontales, que indican que el carril es exclusivo para autobuses y taxis, así como las verticales, que obligan a girar hacia Urbieta, es una infracción de tráfico como entrar en una calle de dirección prohibida. Añadió que, en este tiempo, se han puesto “algunas multas”.

Algunos residentes en la zona, que tampoco tienen permiso para atravesar el tramo cerrado al tráfico privado, han mostrado su malestar por la situación, que se incrementa en horas nocturnas, cuando hay poco tráfico y no hay vigilancia.

No obstante, el departamento de Movilidad recordó que la medida de cerrar el tramo pretende evitar un embudo, con el consiguiente atasco en la calle San Martin durante esta fase de las obras del Topo, lo que se ha conseguido hasta el momento. Asimismo, explicó que cuando se cerró este paso al tráfico privado la presencia de agentes de Movilidad fue continua “para concienciar a los conductores”, aunque luego se redujo y desapareció en el confinamiento.

Por otra parte, en la próxima semana, según el calendario previsto, se cerrará este mismo tramo de calle a todo tipo de vehículos, incluidos los autobuses y taxis. Entonces, no serán necesarios agentes de Movilidad ya que el tramo quedará vallado. El cierre se producirá una vez se pueda abrir al tráfico un carril de la actualmente cerrada calle Easo, con el fin de que los autobuses puedan circular por ella hacia la Avenida. Los vehículos privados tendrán que seguir con el mismo itinerario aconsejado ahora y sin posibilidad de saltárselo.

Por otra parte, la Junta de Gobierno de ayer dio su aprobación a la creación de una aparcamiento para bicicletas de 52 plazas en el parking de La Concha, para lo que se suprimirán varios huecos de aparcamiento en rotación para turismos así como 13 de las 30 tarjetas de estacionamiento que, según el contrato suscrito, se destinan al uso del Ayuntamiento. Los ciclistas podrán contar con un abono de diez euros al mes para estacionar su bicicleta de modo seguro.

Por otra parte, a preguntas de los informadores, el alcalde respondió que el Consistorio ha enviado “varios requerimientos” a la empresa Empark, que gestiona desde hace casi un año el aparcamiento de residentes de Alderdi Eder con el fin de que “cumpla las obligaciones” derivadas de su gestión, que fue cedida por la anterior empresa. Los usuarios llevan meses quejándose del empeoramiento del servicio y han reclamado la devolución de las cuotas de mantenimiento de ocho meses.

Además, la Junta de Gobierno aprobó también prorrogar el periodo de cesión de 26 viviendas del paseo de Morlans, propiedad del Gobierno Vasco, por lo que pagará 20.600 euros. Seis de estas viviendas están siendo destinadas a realojos temporales motivados por las obras de construcción de nuevas zonas residenciales en el entorno del Urumea. Las 20 restantes se destinarán durante un tiempo a los habitantes de tres edificios de la calle Amara de propiedad municipal, que van a ser demolidos por su mal estado.

El parking de

La Concha tendrá 52 estacionamientos seguros para bicicletas al precio de diez euros por mes